Un árabe israelí de 17 años, residente de Jisr az-Zarqa, fue arrestado por la policía israelí y el Shin Bet tras descubrirse que había jurado lealtad al grupo terrorista ISIS y planeaba perpetrar un ataque en la región de Sharon, en el centro del país.
Durante el operativo, las autoridades encontraron en su posesión numerosos documentos con instrucciones para fabricar explosivos y artefactos explosivos improvisados. Al término de la investigación, se presentó una acusación formal en su contra junto con una solicitud de detención preventiva hasta que finalice el proceso judicial.
Una fuente policial de alto rango declaró que la operación fue posible gracias a una precisa labor de inteligencia y a la rápida respuesta de las fuerzas de seguridad. Subrayó que la Policía de Israel y el Shin Bet