El domingo por la mañana, los árabes lanzaron piedras a quienes viajaban por la ruta 60 en dirección norte hacia Jerusalén, cerca de la aldea árabe de Al Aroub.
El MK Itamar Ben-Gvir, que viajaba por la carretera, informó de que los soldados que se encontraban en el lugar no hicieron nada y afirmaron que no habían recibido permiso para responder al lanzamiento de piedras.
Ben-Gvir detuvo su vehículo y sacó un arma, alejando a los terroristas hasta que llegaron más fuerzas de seguridad.
“Esto es una anarquía. Los soldados no pueden responder disparando contra los terroristas hasta que no reciban permiso, y los viajeros que circulan por la carretera corren verdadero peligro de muerte”, dijo Ben-Gvir.
Y añadió: “Esta vez conseguí alejar a los terroristas que arrojaron piedras y rocas después de que sacara mi arma, pero es el trabajo de los soldados de las FDI, a los que hay que instruir para que quien arroje piedras reciba una bala en la cabeza”.