La Fiscalía del Estado presentó dos acusaciones formales detalladas ante el Tribunal de Distrito de Nazaret contra siete acusados: Rami Abu Sha’akh, residente de Shefa-‘Amr; Amir Salman, Anan Mula y Munir Abu Dahar, residentes de Yarka; y tres habitantes de la aldea de Khadr en Siria.
Los acusados enfrentan delitos que abarcan importación, posesión y tráfico de armas, conspiración y aprovechamiento de la guerra en el sur de Siria para introducir armas de contrabando en Israel.
Según las acusaciones de la Fiscalía del Distrito Norte, los acusados actuaron en 2025 dentro de varias redes criminales. Los resultados de la investigación señalan que la red incluía el contrabando de pistolas, fusiles M16 y Kalashnikov, munición y proyectiles RPG, con apoyo de residentes de la aldea de Khadr, y la ocultación de algunas actividades bajo la apariencia de misiones de ayuda humanitaria.
La acusación formal establece que Rami Abu Sha’akh contactó a uno de los acusados sirios, le entregó miles de dólares y equipo adicional, y adquirió una pistola destinada a su introducción clandestina en Israel. En una visita posterior, Abu Sha’akh compró un fusil Kalashnikov, que introdujo de forma ilegal y mantuvo en su poder. Más adelante reclutó a un soldado de las FDI destinado en el sector, quien introdujo otra pistola y unos 200 cartuchos de munición.
En otro caso, Abu Sha’akh intentó importar armamento militar pesado a Israel. El acusado sirio adquirió para él dos lanzacohetes RPG, diez ojivas para RPG, un fusil M16, un fusil Kalashnikov y dos cajas de munición, todo oculto en su domicilio hasta localizar una ruta de contrabando adecuada. El plan no se concretó debido a la detención de los sospechosos.
En otro expediente, el acusado Amir Salman conspiró con los acusados en Khadr para importar seis fusiles M16 a Israel. Para ese fin se reclutó a un soldado de las FDI, Amal Aslim, quien entró en territorio sirio como parte de su servicio. Las armas se entregaron en un punto de encuentro cerca de un puesto de avanzada sirio, donde otro soldado, Yazan Salah, las recogió en un camión militar y las introdujo en Israel. Después de ello, Aslim tomó posesión del cargamento y lo entregó a los acusados de Yarka, cerca de una base en los Altos del Golán.
