Legisladores aplauden la apertura de una causa penal por la filtración de un video de vigilancia del centro de detención de Sde Teiman. La grabación habría mostrado a soldados que abusaron con gravedad de un detenido palestino el año pasado, según la descripción difundida previamente.
Las FDI informan que revisan una posible implicación de personal de la oficina del Abogado general Militar en la difusión del material emitido por las noticias del Canal 12. Esa línea de indagación figura dentro del expediente que ahora reúne testimonios, accesos, copias digitales y decisiones internas relacionadas con el archivo.
El diputado de Sionismo Religioso Zvi Sukkot sostiene: “en medio de la guerra más difícil en la historia de Israel, el Abogado general Militar optó por calumniar a los soldados de las FDI, alegando que estaban involucrados en la violación de terroristas”. Presenta ese señalamiento como prueba de una desviación institucional inadmisible.
Sukkot acusa de forma directa a la general de división Yifat Tomer-Yerushalmi de filtrar el video, la responsabiliza por difundir “propaganda antiisraelí loca en todo el mundo en medio de la guerra”, y remata que debe ir “a prisión”. Ese reclamo se suma a presiones políticas sobre la cúpula jurídica militar.
El legislador integró una multitud que se amotinó ante la base de Sde Teiman tras el arresto de varios soldados vinculados al caso. Una filmación lo muestra mientras empuja las puertas del recinto pese al bloqueo de las FDI. La policía del Distrito Sur lo citó a declarar el lunes.
El ministro de Seguridad Nacional, Itamar Ben Gvir, respalda la investigación y el permiso concedido a Tomer-Yerushalmi por las FDI, y afirma que los pasos adoptados suponen “un desarrollo dramático en la defensa de la democracia contra la conducta criminal disfrazada de acción legal”. Presenta esa postura como defensa institucional.
“Todos los involucrados en el asunto deben rendir cuentas, incluida la propia fiscal general, que inicialmente trató de frustrar la investigación con una declaración falsa ante el Tribunal Superior de Justicia”, alega Ben Gvir sin aportar pruebas. Ofir Katz celebra la pesquisa y afirma que el video “dañó gravemente a los soldados de las FDI, condujo a libelos de sangre contra ellos en todo el mundo, ¡y alguien debe pagar!”
El diputado del Likud Avichai Boaron sostiene que el “video fabricado” solo representa “la punta del iceberg de un sistema que ha hecho de todo, incluso empañar la reputación de Israel en el mundo, para avanzar en su propia agenda en oposición a los tomadores de decisiones y al liderazgo electo”.
