El abogado Hagai Harosh, principal asistente del Fiscal general Gali Baharav-Miara, decidió no intervenir desde el inicio en el caso del Fiscal general Militar Principal. Su exclusión respondió a la implicación directa de la Oficina del Fiscal general en distintos aspectos del expediente, entre ellos las respuestas ante el Tribunal Superior y la pesquisa sobre la filtración del vídeo de Sde Teiman.
De acuerdo con un informe de Avishai Grinzaig en i24 News, al solicitar Baharav-Miara a la asesora legal del Ministerio de Justicia, Yael Kotik, una revisión sobre su posible conflicto de intereses, esta no comunicó que Harosh ya se había retirado del asunto. Tampoco se informó sobre la recusación del fiscal adjunto Altman, omisión que mantuvo sin mención formal dentro del procedimiento.
La petición de opinión legal a Kotik se presentó únicamente tras la llegada de las advertencias y recursos al Tribunal Superior. Antes de ese momento, la fiscal general rechazó apartarse e instruyó al Jefe de Estado Mayor para coordinar directamente con ella. Según el mismo reporte, luego de recibir el dictamen de Kotik, incorporó un documento “juzgador” que cuestionaba su calidad técnica.
Durante la vista ante el Tribunal Superior, el delegado del Fiscal general omitió comunicar a los magistrados que varios altos cargos de la oficina ya se habían abstenido de participar. Esa información no se reflejó en las declaraciones ofrecidas en la sesión judicial.
El informe también indica que el subjefe de Estado Mayor, general de brigada Gal Asael, declaró haber actuado siempre bajo coordinación de la Oficina del Fiscal general. Sostuvo que las directrices provenían del abogado Hagai Harosh, quien, según su testimonio, representaba directamente a la fiscal Baharav-Miara.
El ministro de Seguridad Nacional, Itamar Ben-Gvir, expresó: “He dicho desde el principio —con pleno conocimiento— que Gali Baharav-Miara está personalmente y profundamente implicado en la presentación de declaraciones juradas falsas ante el Tribunal Superior, en ocultar la investigación y en obstruir activamente los procedimientos investigativos. No le ayudará ni a ella ni a quienes intenten encubrir estos detalles. Tendrá que ser investigada y juzgada por los delitos que cometió”.
