Una encuesta reciente publicada el jueves pasado revela que tanto israelíes como palestinos reflejan niveles sin precedentes de miedo y desconfianza mutua. Además, el respaldo de los israelíes judíos a soluciones como un Estado, dos Estados o una confederación con los palestinos ha caído a mínimos históricos.
Un dato que refleja la desconfianza es que cerca del 90% de los encuestados de ambos lados atribuyen al otro intenciones extremistas. Un 66% de israelíes judíos y un 61% de palestinos creen que el otro busca cometer genocidio contra ellos. Además, un 27% de israelíes y un 26% de palestinos afirman que el otro lado intenta controlar toda la tierra “del río al mar” y expulsarlos.
También se destaca que el 94% de los palestinos y el 86% de los israelíes afirman que no confían en la otra parte.
La encuesta “Pulse”, realizada en julio por el Centro Palestino de Investigación Política y de Encuestas (PCPSR) y el Programa Internacional de Resolución de Conflictos y Mediación de la Universidad de Tel Aviv, fue publicada el jueves. Los principales autores del estudio fueron la Dra. Dahlia Scheindlin, el Dr. Khalil Shikaki y el Dr. Nimrod Rosler.
La encuesta entrevistó a 1.270 palestinos (830 de Judea y Samaria y 440 de Gaza) y a 900 israelíes, tanto judíos como árabes, en la segunda quincena de julio. Este estudio, que se realiza cada dos años desde 2017, también analizó cómo los eventos del 7 de octubre y la guerra han impactado el apoyo a diferentes soluciones.
Tanto israelíes como palestinos mostraron similitudes sorprendentes en ciertos puntos. Por ejemplo, el 84% de los israelíes judíos y el 83% de los palestinos consideran que su victimización es peor que la de otros pueblos perseguidos.
El uso de la violencia contra el otro también tiene un apoyo mayoritario. Un 81% de los palestinos justificó los ataques de Hamás el 7 de octubre como una respuesta al bloqueo de Gaza por Israel y Egipto. Sin embargo, solo el 28% de los árabes israelíes justificó esos ataques.
En el lado israelí, el 84% de los judíos considera que las acciones de Hamás justifican la actual ofensiva militar en Gaza. Sorprendentemente, entre los votantes de izquierda, que alguna vez apoyaron mayoritariamente el “campo de la paz”, el 73% de la izquierda moderada y el 44% de la izquierda firme respaldan la guerra.
La encuesta también muestra que el apoyo a la solución de dos Estados ha disminuido significativamente. Solo el 40% de los palestinos y el 21% de los israelíes judíos la respaldan, siendo este último el nivel más bajo registrado desde la década de 1990. No obstante, el 72% de los árabes israelíes aún apoya esta opción.
A pesar de que el apoyo general a la solución de dos Estados es bajo, más del 60% de los encuestados de ambos lados la prefieren a una guerra regional si se logran los compromisos adecuados.
Uno de estos compromisos sería permitir que trabajadores palestinos continúen trabajando en Israel a cambio de la instalación de fábricas en territorio palestino, propuesta respaldada por el 54% de los palestinos y el 47% de los israelíes. Asimismo, el 42% de los palestinos considera que la liberación de prisioneros a cambio del desarme de las facciones armadas impulsaría el apoyo a un acuerdo de paz.
Por su parte, el 61% de los israelíes encuestados afirma que un incentivo efectivo sería el compromiso mutuo de combatir la incitación, incluyendo cambios en los libros de texto, la condena de la violencia y un llamado a la reconciliación.
Entre los árabes israelíes, cualquier propuesta de compromiso que facilite la solución de dos Estados es bien recibida, con niveles de aprobación superiores al 70%.
La idea de una confederación, que solía ser popular en algunos sectores de la izquierda israelí, ha ganado apoyo entre los palestinos, pasando del 22% en 2022 al 35%. Sin embargo, en Israel ha disminuido al 20%, frente al 29% en la encuesta anterior. Aun así, el 52% de los árabes israelíes apoya la idea, frente a solo el 12% de los israelíes judíos.
La opción de un único Estado democrático con derechos iguales es apoyada por el 49% de los árabes israelíes, pero solo por el 25% de los palestinos y el 14% de los israelíes judíos.
En contraste, el 42% de los israelíes judíos apoya la anexión de Judea y Samaria sin conceder derechos a los palestinos, la cifra más alta registrada por la encuesta.
Entre los judíos de Judea y Samaria, el 60% cree que una solución de dos Estados incrementaría la violencia palestina, lo que refuerza la creencia entre las comunidades de que la retirada de Gaza y los acuerdos de Oslo desencadenaron los ataques del 7 de octubre.
En cuanto al futuro de la guerra, prevalece el pesimismo. El 72% de los israelíes judíos, el 68% de los palestinos y el 60% de los árabes israelíes esperan una escalada en Judea y Samaria.
Además, el 58% de los israelíes y el 53% de los palestinos temen que la guerra de Gaza se expanda a nivel regional con la intervención de Irán.
A pesar de ello, una minoría de encuestados se muestra optimista. El 41% de los palestinos y el 23% de los israelíes judíos creen que la guerra actual podría abrir una oportunidad para la paz, similar al acuerdo con Egipto tras la Guerra de Yom Kippur.
Durante la presentación de la encuesta, Shikaki afirmó que, aunque la opinión pública se está endureciendo, no es un impedimento para la paz. Alon Yakter, profesor de la Universidad de Tel Aviv, destacó que “gestos históricos como el de Sadat” podrían transformar la opinión pública, sugiriendo que lo que se necesita es un liderazgo fuerte.