El Departamento de Estado estadounidense elevó el martes su alerta de viaje a Líbano a “no viajar”, citando la situación de seguridad relacionada con los intercambios de cohetes, misiles y artillería entre Israel y Hezbolá.
El anuncio se produjo después de que Hezbolá declarara que el miércoles sería un “día de furia” contra Israel.
