Golan Avitan, un fugitivo israelí sospechoso de asesinar a tres personas que eludió el arresto domiciliario en 2018 huyendo a Marruecos, fue detenido a primera hora de la mañana del miércoles cuando llegó al aeropuerto Ben Gurion.
Tras un primer interrogatorio, será llevado ante un juez del Tribunal de Magistrados de Rishon Lezion, según la policía.
Avitan, de 54 años, estaba supuestamente involucrado con la familia criminal Abergil. En 2015, fue acusado junto a otras 16 personas en lo que se denominó una de las mayores redadas del hampa en la historia de Israel, una investigación policial de varios años con el nombre en clave de Caso 512.
A Avitan se le permitió asistir a un dentista en octubre de 2018 mientras estaba bajo arresto domiciliario, y nunca regresó. La policía cree que utilizó un secador de pelo para desactivar sus esposas electrónicas.
Diez meses después, cuando sus hijos vinieron a visitarlo desde Israel, fue detenido por la policía local mientras asistía a los servicios en una sinagoga de Casablanca. Tras un esfuerzo coordinado entre la Policía de Israel, Interpol y el gobierno marroquí, el sospechoso fue detenido.
Tras su detención y deportación a Israel el miércoles, Avitan fue recluido en un centro de detención de Rabat.
Avitan ha sido vinculado a una explosión en Tel Aviv en 2003 que mató a la figura del hampa Zeev Rosenstein, un adversario del infame gángster Yitzhak Abergil.
Naftali Magad, Rahamim Tzruya y Moshe Mizrahi, todos ellos espectadores inocentes, murieron y varios otros resultaron heridos en el atentado. A pesar del intento de asesinato, Rosenstein pudo salir ileso.
La fiscalía llevaba varios meses intentando negociar acuerdos con 17 de los acusados del caso 512 antes de la fuga de Avitan. Se acordó que Avitan, acusado de estar implicado en el atentado, cumpliría ocho años de prisión.
Fue el único acusado que rechazó un acuerdo de culpabilidad.
La banda Abergil, una de las familias criminales más conocidas de Israel, era famosa por su eficacia y brutalidad.
Abergil, que tenía 52 años en el momento de la explosión de 2003, fue condenado en junio a 30 años de prisión por su papel en la planificación y dirección del atentado.