Los hospitales de Israel iniciaron el retorno de pacientes a las áreas de superficie tras el cese de la guerra de 12 días con Irán, concluida ayer.
En el Centro Médico Rambam de Haifa, las primeras personas en dejar el hospital subterráneo, originalmente un estacionamiento, fueron mujeres que dieron a luz en esas instalaciones. “Al menos 800 pacientes volverán a las salas convencionales”, afirmó el portavoz del hospital.
El Centro Médico Ichilov completó el traslado de la unidad de recién nacidos en riesgo a su piso habitual.
Por su parte, el Centro Médico Galilea en Nahariya y el Centro Médico Beilinson en Petah Tikvah confirmaron que sus pacientes ya abandonaron las áreas subterráneas protegidas para reincorporarse a las instalaciones regulares.