Israel dijo el viernes que discutiría con su aliado más cercano, los Estados Unidos, un informe periodístico que indica que las fuerzas de mantenimiento de la paz dirigidas por los Estados Unidos en la Península del Sinaí de Egipto podrían ser reducidas, calificando de “importante” su presencia de casi cuatro años.
El Secretario de Defensa de Estados Unidos, Mark Esper, insistió en la retirada de algunas tropas estadounidenses de las fuerzas internacionales de mantenimiento de la paz que dirige en la Península del Sinaí, informó el jueves el Wall Street Journal, citando a funcionarios estadounidenses actuales y anteriores.
La retirada tendrá lugar mientras Egipto lucha contra la insurgencia islamista en la península desértica, donde las fuerzas multinacionales y los observadores (MFI’s) dirigidos por los Estados Unidos han estado presentes desde principios de la década de 1980, tras el acuerdo de paz de Egipto con Israel de 1979.
En una entrevista con la emisora de radio 102 FM de Tel Aviv, el Ministro de Energía israelí, Yuval Steinitz, a quien se le pidió que comentara el informe, dijo que “la fuerza internacional en el Sinaí es importante, y (a) la participación de los Estados Unidos es importante”.
“Por supuesto, la cuestión se planteará entre nosotros y los estadounidenses”, dijo Steinitz, miembro del gabinete de seguridad del Primer Ministro Benjamin Netanyahu.
Las embajadas de los Estados Unidos y Egipto en Israel no respondieron inmediatamente a las solicitudes de comentarios, al igual que la oficina de MFI en Israel.
Según su sitio web, la MFI tiene 1.156 tropas estadounidenses y otros 12 países, que cubren más de 10.000 kilómetros cuadrados (3.860 millas cuadradas) en la Península del Sinaí. Aproximadamente 454 de su personal son estadounidenses.
Pero desde 2015, según su sitio web, el número de fuerzas ha disminuido en más de un 30%.
Durante ese período, Israel aceptó ayudar a desmilitarizar el Sinaí para que Egipto pudiera llevar a cabo barridos de contrainsurgencia, generalmente en el extremo norte de la península, donde los ataques a pequeña escala son frecuentes.
El Cairo considera que la MFI forma parte de una relación con Israel que, aunque impopular para muchos egipcios, le ha aportado miles de millones de dólares en ayuda para la defensa de los Estados Unidos, endulzando la desmilitarización forzosa en el extranjero de su territorio soberano del Sinaí.
Para los israelíes, MFI ofrece garantías estratégicas, recordando que en 2013 el presidente egipcio Abdel Fattah al-Sisi derrocó a un gobierno islámico elegido y hostil a su vecino.
Artículo con información de The Jerusalén Post