Las fuerzas de seguridad clausuraron el martes las oficinas de los comités de reconciliación en Umm al-Fahm, argumentando que la organización tiene conexiones con el islamismo. Durante el operativo, la policía y el Shin Bet allanaron las instalaciones y detuvieron al jeque Raed Salah, quien fue liberado horas después.
Estos comités, conocidos como “difusión de la paz”, fueron creados en 2017 por Salah bajo el Comité Superior de Seguimiento de los Ciudadanos Árabes de Israel, una entidad que representa a la minoría árabe en el país. Su propósito declarado es reducir la violencia en la comunidad árabe a través de la mediación en disputas familiares.
La redada se llevó a cabo luego de que el ministro de Defensa, Israel Katz, declarara ilegal la iniciativa, argumentando su vinculación con la Rama Norte del Movimiento Islámico, liderada por Salah. Israel prohibió esta facción en 2015, acusándola de incitar al terrorismo.
Salah fue arrestado en 2017 por sus sermones en los que elogió a los atacantes que asesinaron a dos policías en el Monte del Templo de Jerusalén. En 2020, recibió una condena por incitación al terrorismo y, tras su liberación en 2021, expandió el programa de reconciliación a más ciudades árabes en un contexto de creciente violencia comunitaria.
Entre 2021 y 2023, el número de asesinatos en comunidades árabes casi se duplicó, pasando de 126 a 244 víctimas, según *Abraham Initiatives*. En 2023, la cifra se situó en 230. Para abordar esta crisis, el programa estableció directrices comunes para la resolución de conflictos mediante comités locales.
La policía sostiene que estos comités funcionan como una fachada para que Salah continúe promoviendo su agenda islamista, alineada con la ideología de la Hermandad Musulmana y la Rama Norte del Movimiento Islámico.
Mansour Abbas, líder del partido Ra’am, rechazó la medida y afirmó que los comités de reconciliación no responden a ninguna ideología o movimiento político. Advirtió que su ilegalización podría afectar los esfuerzos para reducir la violencia en la sociedad árabe.
«Esperaría que el Ministerio de Defensa, el ministro de Seguridad Nacional y el Fiscal general usen su autoridad contra las organizaciones criminales que tienen sometidos a los ciudadanos árabes, en lugar de actuar contra los comités de reconciliación», declaró al diario *Haaretz*.