Israel empezará a permitir a los árabes palestinos de Judea y Samaria volar al extranjero a través del aeropuerto Ramon, en las afueras de la ciudad sureña de Eilat, según informó el martes la autoridad aeroportuaria.
La nueva política israelí, que permitirá a los palestinos volar a Turquía sin necesidad de ir a Ammán, se produce en medio de una gran aglomeración en el único cruce de Judea y Samaria con Jordania. Sin embargo, no está claro hasta qué punto será práctica la imitación, ya que el aeropuerto está a casi tres horas de viaje desde Judea y Samaria en su punto más cercano.
Hasta ahora, los palestinos que querían volar al extranjero tenían que viajar a Jordania y embarcar en un vuelo desde allí, o conseguir un permiso de entrada en Israel difícil de conseguir para volar desde el aeropuerto Ben Gurion.
Las compañías turcas Pegasus Airlines y AtlasGlobal tienen previsto lanzar dos vuelos semanales para los palestinos desde el aeropuerto de Ramón a Antalya y Estambul a finales de este mes y principios de septiembre, según informó la Autoridad Aeroportuaria de Israel en un comunicado.
El anuncio fue escaso en detalles, incluyendo cómo los palestinos podrán llegar a Ramón y si se requerirán permisos especiales.
El anuncio no incluía ninguna otra opción para los palestinos que no fuera Turquía, que es un destino turístico popular para muchos de ellos. Se espera que el aeropuerto comience a ofrecer vuelos a destinos en Europa, dijo la IAA, aunque no estaba claro si los palestinos también podrán acceder a esos vuelos.
La iniciativa fue encabezada por el enlace militar de Israel con los palestinos, el general de división Ghassan Alian. Ghassan Alian. La unidad de Coordinación de Actividades Gubernamentales en los Territorios (COGAT) ha estado trabajando con el Shin Bet y la Policía de Israel para garantizar los protocolos de seguridad adecuados en el Aeropuerto Ramón como parte de la iniciativa, dijo la oficina de Alian a los medios de comunicación hebreos.
El aeropuerto de Ramón, que se construyó justo al norte del centro turístico de Eilat, en la costa del Mar Rojo, en el extremo sur de Israel, fue concebido como puerta de entrada para que los turistas europeos llegaran a la ciudad turística, además de servir a los vuelos nacionales.
Para llegar allí, los palestinos del norte de Judea y Samaria tendrán que viajar cinco horas o más, más del doble de la distancia hasta Ammán, aunque esta última ruta puede implicar largas esperas en el paso fronterizo del puente Allenby.
Se rumoreaba que la iniciativa COGAT iba a ser anunciada antes del viaje del presidente estadounidense Joe Biden a Israel el mes pasado, como parte de su paquete de medidas destinadas a mejorar los medios de vida de los palestinos.
El año pasado, el ministro de Cooperación Regional, Esawi Frej, propuso convertir el emplazamiento del antiguo aeropuerto de Atarot, en el este de Jerusalén, donde Israel pretende impulsar un proyecto de viviendas para residentes judíos, en un aeródromo de propiedad conjunta israelí-palestina. El plan aún no ha despegado.