Israel ya no quiere la vacuna COVID-19 de AstraZeneca y está explorando con la compañía si un gran cargamento en preparación podría ser enviado a otro lugar, dijo el miércoles el comisionado de coronavirus de Israel.
“Estamos tratando de encontrar la mejor solución. Después de todo, no queremos que (las vacunas) lleguen aquí y tengamos que tirarlas a la basura”, dijo el funcionario, Nachman Ash, a la Radio del Ejército, afirmando que las necesidades de Israel estaban siendo cubiertas por otros proveedores.
En sus declaraciones, Ash no hizo referencia a que la vacuna de AstraZeneca ha sido asociada con coágulos de sangre muy raros en Europa. Muchos países reanudaron su administración después de que el organismo de control de medicamentos de la Unión Europea dijera que los beneficios eran mayores que los riesgos.
El año pasado, Israel se lanzó a por las dosis de la vacuna en el momento álgido de la pandemia y realizó pedidos anticipados a varias empresas.
Se decantó en gran medida por la vacuna de Pfizer/BioNTech, poniendo en marcha uno de los despliegues más rápidos del mundo. Las infecciones por COVID-19 en Israel han disminuido drásticamente y la economía se ha reabierto.
Israel también está comprando las vacunas contra el COVID-19 a Moderna, que utiliza una tecnología similar de ARN mensajero (ARNm).
Ash dijo que con los suministros asegurados hasta 2022, Israel ya no necesitaba los 10 millones de dosis que acordó comprar a AstraZeneca.
“Sin duda pueden utilizarse en otros lugares del mundo. En este momento, estamos tratando de encontrar, junto con la empresa, la mejor manera de hacerlo”, dijo.
“Creemos que lo mejor sería que (las vacunas) no llegaran a Israel, y estamos de acuerdo con la empresa en alguna forma de desviarlas a otro lugar”.
Los funcionarios de AstraZeneca no hicieron comentarios inmediatos.
Alrededor del 81% de los ciudadanos o residentes israelíes mayores de 16 años -el grupo de edad elegible para la vacuna de Pfizer/BioNTech en Israel- han recibido las dos dosis.
Unos 167.000 de los 5,2 millones de palestinos de la Judea y Samaria controlada por la Autoridad Palestina y de la Gaza islamista de Hamás han recibido al menos una dosis de la vacuna, con suministros procedentes de Israel, Rusia, los Emiratos Árabes Unidos, el programa mundial de reparto de vacunas COVAX y China.