El Ministerio de Salud de Israel comunicó el domingo la muerte de un menor de siete años de Jerusalén tras infectarse con el virus del sarampión. El niño padecía una enfermedad previa y contaba con una dosis de la vacuna. Es la novena víctima desde el inicio del brote y la primera con afecciones preexistentes o vacunación parcial.
Fue trasladado de urgencia a la sala de emergencias luego de sufrir complicaciones derivadas del virus, pero murió al llegar al hospital. Hasta la noche del domingo, dieciséis personas permanecían hospitalizadas por sarampión, de las cuales ocho se encontraban en unidades de cuidados intensivos.
En su declaración, el Ministerio subrayó la necesidad de acudir con rapidez a centros médicos ante la aparición de síntomas o sospecha de contagio. “El Ministerio reitera que el sarampión es una enfermedad prevenible a través de una vacuna segura y eficaz”, señaló el comunicado oficial.
Las inmunizaciones contra el sarampión se aplican habitualmente a los niños de un año y a los seis años. Desde el brote, el Ministerio adelantó la segunda dosis a los dieciocho meses y permitió administrar una dosis inicial a bebés entre seis y once meses. Esta aplicación “adicional” no forma parte del esquema regular y se reserva para zonas con brotes o para menores que viajan a regiones afectadas.
Las áreas con presencia activa del brote incluyen Jerusalén, Beit Shemesh, Bnei Brak, Harish, Modi’in Illit, Nof Hagalil, Kiryat Gat, Ashdod, Tzfat, Netivot, el Consejo Regional de Mateh Binyamin y Tekoa. En estas localidades, las vacunas están disponibles en las clínicas Tipat Halav, en las sedes de las organizaciones de salud y en centros especiales sin necesidad de cita previa.
El Ministerio recomendó que las personas no vacunadas y los padres de bebés de seis a once meses con una sola dosis eviten concentraciones masivas en las ciudades afectadas, por el alto riesgo de contagio. Desde septiembre, la campaña de inmunización ha impulsado un incremento del 500% en Jerusalén y del 630% en Beit Shemesh respecto al año anterior. La cobertura de la primera dosis subió del 77% al 84% en Jerusalén y del 72% al 82,6% en Beit Shemesh.
