La multitud de decenas de miles reunida en la Plaza de los Rehenes ruge cuando el presentador anuncia que los 13 rehenes vivos restantes están en manos israelíes.
“Gracias a todos los combatientes que participaron en la guerra de las Espadas de Hierro durante los últimos dos años, a todos los heridos que pagaron un alto precio, a todas las viudas, a todos los reservistas, gracias, gracias”, declara.
La multitud porta banderas israelíes y algunas estadounidenses.
De fondo, suena música hebrea alegre y la gente baila en el escenario. Algunos miembros de la audiencia corean “Am Israeli Chai” (la nación de Israel vive).
