Las fuerzas de seguridad israelíes frustraron un intento de contrabando de armas a lo largo de la frontera entre Israel y Jordania el jueves por la noche, incautando unas 50 armas, informa The Times of Israel.
En un comunicado conjunto el viernes, la Policía de Israel y las Fuerzas de Defensa de Israel dijeron que las tropas en el Valle del Jordán, con la ayuda de soldados que operaban cámaras de vigilancia, localizaron dos bolsas con docenas de armas de fuego a lo largo de la frontera.
Las fuerzas del orden dijeron que sospechaban que las armas se dirigían a ser vendidas con fines tanto criminales como terroristas.
Según la policía, el valor de las armas se estima en unos 2 millones de NIS (625.000 dólares).
No hubo detenciones inmediatas en relación con el aparente intento de contrabando.
El mes pasado, las fuerzas de seguridad detuvieron a cuatro personas sospechosas de introducir armas de contrabando en Israel desde Jordania y confiscaron decenas de armas de fuego.
A diferencia de las otras fronteras de Israel -con Egipto, Líbano y Siria-, su frontera con Jordania está en gran parte abierta, a menudo sin vallas significativas, y está relativamente poco vigilada, lo que la convierte en un lugar fácil para el contrabando a gran escala.
En los últimos meses, las Fuerzas de Defensa de Israel (FDI) han intensificado sus esfuerzos para detener los intentos de contrabando a lo largo de la frontera jordana, pero los funcionarios han admitido que los militares no han logrado mucho éxito hasta ahora.
En el comunicado del viernes, la policía y el ejército calificaron la redada como «otro éxito» de las dos autoridades «que trabajan intensamente para localizar las fuentes de armas ilegales en la comunidad árabe, al tiempo que eliminan las rutas de contrabando y el comercio a través de ellas».
La policía ha tratado de reprimir cada vez más la difusión, hasta ahora sin paliativos, de armas ilegales en la comunidad árabe israelí, que se han utilizado para perpetrar un número récord de asesinatos en los últimos años.
Según Abraham Initiatives, un grupo no gubernamental que lucha contra la violencia en la comunidad árabe, en 2021 murieron 125 árabes en Israel como consecuencia de la violencia y la delincuencia, lo que supone un récord histórico. Desde principios de este año, otros 12 han sido asesinados en incidentes de crímenes violentos.