El Servicio Penitenciario de Israel (SPI) informó que Giora Praff, condenado a cadena perpetua por el asesinato de su esposa, fue encontrado muerto en su celda en la prisión de Nitzan. Las autoridades han anunciado que se llevará a cabo una investigación estándar en estos casos.
Praff fue sentenciado en marzo pasado por el asesinato de su esposa Esti Ahronovitz en 2019. Con antecedentes de violencia doméstica, Praff disparó cinco veces a Ahronovitz, incluyendo dos disparos en la parte posterior de su cabeza mientras ella yacía en el suelo.
Los jueces del Tribunal de Distrito de Beersheba determinaron que no había circunstancias atenuantes en sus acciones, justificando así la cadena perpetua.
Giora Praff, también conocido como Perry, era un destacado doctor humanitario que participó en varias misiones de ayuda internacional y fue el primer miembro israelí de la Cruz Roja. A pesar de su reputación en Israel, Estados Unidos y otros países, confesó haber cometido violencia doméstica y enfrentó acusaciones de acoso, agresión y hostigamiento.
Según el acta de acusación, Ahronovitz inició acciones legales contra Praff como parte de una disputa financiera relacionada con los gastos del hogar.