El Mossad compró 10 millones de máscaras médicas para protegerse contra el coronavirus hace más de una semana, según The Jerusalén Post.
Debido a lo delicado de la información, el Post no pudo reportarlo hasta que llegaron a Israel el lunes. Pero sí que señaló en un informe del viernes que nuevas adquisiciones significativas estaban en camino.
Además de los 10 millones de mascarillas médicas, el Mossad trajo unas pocas docenas de ventiladores, decenas de miles de equipos de prueba y unas 25.000 mascarillas quirúrgicas N95 que están diseñadas para proteger, al portador, de las partículas y el líquido transportados por el aire. Espera traer más equipo médico al país. El director del Mossad, Yossi Cohen, dirige un centro de comando especial junto con otras unidades de seguridad nacional y el Ministerio de Salud.
El martes pasado, el Primer Ministro Benjamin Netanyahu dijo que Cohen se encargaba de los esfuerzos del país para comprar equipo médico en el extranjero.
Cohen logró traer 100.000 equipos de prueba a Israel hace dos semanas, con un estimado de cuatro millones en camino.
Los equipos se obtuvieron de países con los que Israel no tiene relaciones diplomáticas, según supo el Post en su momento. Un informe de Al Jazeera dijo que los países estaban en el Golfo Pérsico, lo que podría ser una razón por la que el Mossad tomó la delantera.