Un mono Guénon fue rescatado en Kafr Qasim, en el marco de una operación que expone la creciente red de tráfico de fauna en Israel.
Otro mono rescatado tras operativo en oficina de Kafr Qasim
Durante una inspección realizada en una oficina ubicada en Kafr Qasim, agentes de la Policía Fronteriza y detectives encontraron un mono Guénon dentro de una jaula en aparente estado de abandono. Las autoridades entregaron al animal a la Autoridad de Naturaleza y Parques de Israel, que se encargará de su recuperación. Este caso, que tuvo lugar a inicios de abril de 2025, refuerza las sospechas sobre la magnitud del tráfico de especies en la región.
La operación forma parte de una investigación en curso que comenzó más de un mes atrás, con el objetivo de desarticular a una red criminal que introduce ilegalmente monos y cachorros de león en territorio israelí desde Egipto y Jordania. El rescate del primer mono ocurrió el 5 de marzo de 2025, y desde entonces se han identificado 32 ejemplares en diversas zonas del país.
En los días previos al hallazgo en Kafr Qasim, la policía localizó cuatro monos en menos de 24 horas. Esta frecuencia ha llevado a las autoridades a mantener operativos constantes para interceptar nuevas entradas de animales.
Además de los monos, los cuerpos de seguridad han incautado otras especies, lo que demuestra la variedad de animales exóticos que los traficantes intentan ingresar al mercado negro. Estos casos revelan un patrón de tráfico sistemático que afecta a múltiples especies.
Incautaciones recientes revelan red criminal bien estructurada
En febrero de 2025, un operativo en el sur de Tel Aviv permitió confiscar dos cachorros de león hallados en condiciones precarias dentro de un almacén. Los animales fueron trasladados a un centro de rehabilitación tras comprobarse que los documentos de origen eran falsos.
Este incidente mostró la audacia de los traficantes, quienes, según las autoridades, trasladaron a los felinos desde Egipto a través del Sinaí, una ruta comúnmente usada en actividades ilícitas.
En diciembre de 2024, agentes interceptaron en el puerto de Haifa un cargamento con 15 loros grises africanos, especie protegida por CITES. Los animales estaban confinados en condiciones inadecuadas, con signos visibles de estrés. Las primeras investigaciones indicaron que el envío, procedente de Jordania, tenía como destino final Europa.
Otro caso destacado ocurrió en noviembre de 2024 en Jerusalén, donde una operación conjunta permitió rescatar tres tortugas de espolones africanas. Las tortugas se encontraban escondidas bajo una cama en un apartamento. El propietario fue arrestado tras no presentar documentación legal de tenencia.
Casos recientes de tráfico de fauna silvestre en Israel
- Febrero 2025: dos cachorros de león incautados en Tel Aviv con documentos falsos.
- Diciembre 2024: 15 loros grises africanos interceptados en el puerto de Haifa.
- Noviembre 2024: rescate de tres tortugas africanas escondidas en un apartamento en Jerusalén.
- Octubre 2024: hallazgo de un cocodrilo joven en una camioneta abandonada en el Néguev.
- Enero 2025: 10 serpientes pitón reales encontradas en un contenedor en el puerto de Eilat.
Tráfico de animales se alimenta de rutas desde África y Medio Oriente
Según reportes de la policía, los traficantes aprovechan la inestabilidad en áreas fronterizas para introducir animales desde África a Israel. Las fronteras con Egipto y Jordania se han convertido en canales clave para el traslado ilegal de especies exóticas.
Los monos Guénon suelen capturarse en países como Uganda o la República Democrática del Congo, donde la deforestación y la caza reducen sus poblaciones. Posteriormente, los intermediarios los transportan hacia Israel, donde algunos ejemplares terminan en colecciones privadas o son enviados a otros países.
Uno de los puntos más usados por estas redes es el puerto de Eilat. En enero de 2025, agentes aduaneros detectaron un contenedor con 10 serpientes pitón reales camufladas entre mercancía declarada como decoración. El hallazgo dio lugar a una investigación que expuso vínculos con una red transnacional activa entre Sudán, Egipto e Israel.
Estas rutas y métodos han dificultado la tarea de las autoridades, que trabajan con entidades como Interpol y la Organización Mundial de Aduanas para rastrear los movimientos de estas organizaciones criminales.
Impacto del tráfico en los animales y respuesta institucional
Los animales rescatados, incluidos los monos Guénon, son enviados a centros de rehabilitación gestionados por la Autoridad de Naturaleza y Parques, donde reciben cuidados médicos. No obstante, algunos llegan con daños físicos y psicológicos irreversibles, lo que impide su reintegración a la vida silvestre.
En muchos casos, los ejemplares presentan síntomas de desnutrición, infecciones o comportamientos anómalos. Por esta razón, algunos deben permanecer en santuarios de manera indefinida.
Las fuerzas de seguridad han incrementado los operativos en ciudades como Tel Aviv, Jerusalén y Haifa, donde los animales traficados aparecen en mercados ilegales o en manos de coleccionistas. En marzo de 2025, un operativo en los suburbios de Tel Aviv permitió incautar un lémur de cola anillada ofrecido en internet por 5.000 dólares. El vendedor, un ciudadano extranjero, fue arrestado.
Aunque las autoridades han logrado rescatar decenas de ejemplares, reconocen que la demanda impulsada por redes sociales y coleccionismo sigue alimentando el tráfico. El caso más reciente en Kafr Qasim demuestra que el fenómeno continúa y requiere cooperación internacional sostenida.