Tras más de 15 meses de cautiverio, los testimonios de los rehenes liberados en Gaza describen un escenario de privaciones, aislamiento y maltratos constantes a manos de sus captores.
El sitio de noticias Ynet informó el domingo que los cinco soldados de vigilancia de las FDI liberados —Agam Berger, Karina Ariev, Daniella Gilboa, Naama Levy y Liri Albag— fueron trasladados repetidamente entre túneles y apartamentos en Gaza. Con frecuencia permanecían separados durante semanas, sin contacto entre ellos.
Según el informe, Naama Levy pasó gran parte de su cautiverio en aislamiento. Además, algunos soldados fueron forzados a realizar tareas domésticas para las familias de sus captores, incluyendo cocinar, limpiar y cuidar niños.
A pesar de la escasez extrema de alimentos y agua, que los obligó a racionar incluso granos de arroz, los rehenes hicieron esfuerzos por preservar sus costumbres religiosas. Durante Yom Kipur decidieron ayunar y en Pésaj evitaron el consumo de pan leudado.
La última en ser liberada de este grupo, Agam Berger, mantuvo estrictamente la observancia del Shabat durante su cautiverio.
Ocho días después de su regreso, Daniella Gilboa publicó en Instagram un mensaje de agradecimiento. En él expresó que su mayor temor antes de ser secuestrada era ser olvidada.
“La angustia de este año ha sido indescriptible”, escribió Gilboa en un extenso mensaje, donde también reconoció el apoyo recibido por su familia y rechazó los rumores sobre su supuesta muerte, difundidos por Hamás.
“No quería rendirme ni despedirme, así que me aferré a la esperanza y recé con todas mis fuerzas”, relató.
Recordó que dedicó media hora a rezar por sus compañeras de cautiverio, pues sintió que era lo único que podía hacer en ese momento. “Solo la fe podía salvarnos”, afirmó.
El sábado, junto a los otros cuatro soldados liberados recientemente, recitó Birkat Hagomel, la bendición judía que se pronuncia tras sobrevivir a un gran peligro.
“Este era el momento que esperaba desde el 7 de octubre”, declaró Gilboa. “Agradecer a Dios por haberme salvado contra todo pronóstico”.
El rehén Ofer Calderón, liberado el sábado tras 484 días en Gaza, se enteró hace pocas semanas de que su hijo Rotem había sobrevivido al ataque del 7 de octubre de 2023.
Su primo Eyal compartió con Ynet detalles de la conversación que Calderón tuvo con su familia.
“La incertidumbre lo acompañó durante todo el cautiverio y solo a través de los medios supo que su hijo seguía vivo”, explicó.
Describió a Calderón como optimista tras su liberación, pero advirtió que el proceso de rehabilitación será largo y complejo. “Las imágenes de ayer pueden ser engañosas, no reflejan lo que ha atravesado”, señaló, en referencia a la aparente fortaleza de Calderón durante su recibimiento en el hospital.
“El secuestro fue una pesadilla”, destacó. “Ahora se está recomponiendo, reencontrándose con sus hijos y asimilando todo lo que ocurrió en este año y medio”.
Ynet también reveló que Calderón y Yarden Bibas, otro rehén liberado el sábado, estuvieron encerrados en jaulas y túneles en Jan Yunis durante las primeras semanas de su cautiverio, donde sufrieron maltratos físicos y psicológicos.
Un informe de la emisora Kan detalló la experiencia de Keith Siegel, ciudadano israelí-estadounidense recientemente liberado. En un principio creyó que su hijo Shai había muerto en el ataque del 7 de octubre, hasta que escuchó su voz en una transmisión de radio durante la guerra.
Siegel, vegetariano, fue obligado a consumir carne y, en varias ocasiones, pasó días enteros sin comer.
Las condiciones de los cinco rehenes tailandeses liberados el jueves también fueron descritas en el informe de Ynet.
PONGak Thenna, Sathian Suwannakham, Watchara Sriaoun, Bannawat Seathao y Surasak Lamnau relataron largos periodos de inanición, dificultades para respirar en túneles subterráneos y semanas enteras en completa oscuridad.
Divididos en dos grupos, aprendieron a comunicarse en árabe con sus captores para intentar mejorar sus condiciones.
Hasta el momento, 13 rehenes israelíes han sido liberados bajo el acuerdo vigente, que estipula la liberación de 33 “rehenes humanitarios” en una primera fase de 42 días, acompañada de un cese temporal de los combates en Gaza.
Los cinco rehenes tailandeses fueron liberados fuera del marco de este acuerdo entre Israel y Hamás.
Conforme avance la liberación de los 33 rehenes, Israel excarcelará a 1.904 terroristas presos palestinos, entre ellos más de 100 que cumplen cadena perpetua por atentados mortales.
El sábado, 90 terroristas presos fueron liberados, nueve de ellos con condenas de cadena perpetua por terrorismo.