Gideon Sa’ar, exministro de Justicia, se opone a la entrada de trabajadores palestinos a Israel, argumentando riesgos de seguridad.
El exministro de Justicia israelí, Gideon Sa’ar, actualmente ministro sin cartera en la coalición de emergencia, expresó su firme rechazo a la propuesta de permitir la entrada de trabajadores palestinos de Judea y Samaria a Israel. Esta postura se mantiene a pesar de las advertencias de las autoridades de seguridad sobre posibles estallidos de violencia y terrorismo en Judea y Samaria, vinculados a las difíciles condiciones económicas en la región.
“La admisión de trabajadores de un territorio enemigo en tiempos de guerra es un grave error con consecuencias letales”, declaró Sa’ar. Esta declaración surge en un contexto de tensión aumentada, particularmente después del reciente ataque terrorista en Ra’anana. El atentado, que resultó en muertes, fue llevado a cabo por palestinos que trabajaban ilegalmente en Israel, según informes del Shin Bet, el servicio de seguridad interna de Israel.
Sa’ar enfatizó la necesidad de prevenir el cruce ilegal de palestinos desde Judea y Samaria a Israel, una medida que considera crucial para garantizar la seguridad nacional. A su vez, el Shin Bet ha estado presionando para que los trabajadores palestinos, que han sido sometidos a controles de antecedentes, se les permita volver a sus empleos en Israel.
En otro aspecto de la política de seguridad, Sa’ar descartó la posibilidad de un alto el fuego permanente como parte de un acuerdo para la liberación de rehenes en Gaza. “Ceder ante las demandas de Hamás y detener la guerra sin haberlos derrotado es inaceptable”, afirmó. Según Sa’ar, las actuales demandas de Hamás implican una rendición incondicional de Israel, una opción que considera inviable. En este escenario, Sa’ar ve como única alternativa la continuación de la presión militar.