En un panel de teleconferencia organizado por el Foro de Rehenes y Familias Desaparecidas, el profesor Hagai Levine, jefe del equipo de salud del grupo, señaló que “cuanto más tiempo [pasen] en cautiverio, más daño, psicológico y físico”, sufrirán los rehenes. Tras la última liberación de prisioneros en febrero, agregó que “en los primeros días, la gente piensa que porque los rehenes están caminando, están hablando, tal vez la situación no sea tan mala”.
Levine detalló que con el tiempo se evidencian lesiones internas, como problemas renales, neurológicos y cardíacos, que pueden agravarse, incluido el envejecimiento acelerado. Añadió que los familiares de los rehenes han “soportado dos años de infierno” y también pueden presentar problemas de salud derivados del estrés y la espera prolongada.
El experto describió que los liberados deben pasar de “ser deshumanizados por los terroristas de Hamás a convertirse en humanos en términos de autonomía y control, individuos que pueden tomar sus propias decisiones, lo cual es un proceso complejo, pero tenemos algo de experiencia de las liberaciones anteriores”. Este proceso implica recuperación física y psicológica progresiva.
Einat Yehene, psicóloga principal de rehabilitación del grupo, afirmó que está “muy feliz de que el presidente [Donald] Trump realmente haya resaltado la necesidad de liberar a todos los rehenes a la vez, porque hemos aprendido el impacto adverso de las liberaciones secuenciales, en los propios rehenes y también en las familias y en su capacidad de recuperación”. También señaló la urgencia de devolver a los rehenes muertos a un entierro adecuado.
Yehene agregó que existen “diferencias entre una familia que abre champán en medio de la noche en la Plaza de los Rehenes y, al mismo tiempo, otras familias de rehenes muertos que realmente están perdiendo la cabeza y no saben qué hacer consigo mismos”. Levine concluyó que la “toma masiva de rehenes” constituye una emergencia de salud pública de interés internacional, al evidenciarse un impacto significativo en la salud física y mental de los afectados.
