Edan Alexander, ciudadano estadounidense-israelí liberado del cautiverio de Hamás el lunes, compartió detalles de su experiencia como rehén tras recibir el alta hospitalaria el viernes, según informó N12. Relató que lo movilizaron entre distintos escondites en Gaza, y en una ocasión lo trasladaron por un mercado concurrido en un carro tirado por burros, acompañado por un terrorista vestido de mujer.
Durante más de un año, permaneció confinado en túneles subterráneos, casas de seguridad de Hamás, mezquitas, escuelas y tiendas de campaña destinadas a palestinos desplazados. Su padre confirmó que sufrió heridas tras el colapso de un túnel sobre él.
Por un tiempo, compartió cautiverio con Matan Zangauker, cuya madre, Einav, afirmó haber recibido una señal de vida de su hijo. Alexander perdió cerca de 20 kg debido a una dieta forzada de agua de mar y pan sucio. Describió su experiencia como “un año de infierno”.
A pesar de las duras condiciones, tuvo acceso a noticias y supo que sus padres se reunieron con el presidente de Estados Unidos, Donald Trump, en el aniversario de su secuestro, el 7 de octubre. Esta semana, Alexander habló con Trump, quien mencionó que la madre de Alexander lo había presionado constantemente para lograr la liberación de su hijo.
“Todo está bien ahora”, expresó Trump a Alexander. “Ansío verte en la Casa Blanca. La nación entera quiere conocerte. Eres más famoso que yo ahora mismo. Disfrútalo mientras dure, mantente fuerte y tómalo con calma”.