A pesar de los informes sobre los avances en las conversaciones en curso entre Israel y Líbano para resolver la disputa de la frontera marítima en torno al yacimiento de gas de Karish, un funcionario lanzó un claro mensaje a Hezbolá para que no provoque a Israel.
“Nos mantenemos vigilantes y nuestra política sigue vigente: Comenzaremos a extraer gas de Karish tan pronto como se completen los preparativos, y cualquier ataque a la plataforma de perforación de gas provocará una represalia israelí”, dijo el funcionario. El funcionario añadió que “a pesar de los avances, aún queda mucho trabajo por hacer y el gobierno de Líbano tiene que tomar una decisión”.
La opinión generalizada en Israel es que al Líbano le gustaría llegar a un acuerdo con Israel, pero es Hezbolá quien ha intentado poner un obstáculo en la rueda de cualquier acuerdo. Se cree que el secretario general de Hezbolá, Hassan Nasrallah, querría atribuirse el mérito de cualquier concesión que obtenga Líbano como parte de las conversaciones. También existe la posibilidad de que busque un pretexto para un enfrentamiento con Israel, posiblemente por instrucciones de Irán, pero también por sus consideraciones internas.
El funcionario señaló que aún no está claro cuándo comenzará la producción real de gas, pero advirtió a Hezbolá que “cometería un gran error de cálculo si toma medidas contra la actividad israelí de perforación de gas”.