Un informe de Estados Unidos sugiere que la periodista palestino-estadounidense Shireen Abu Akleh murió probablemente por disparos accidentales de las Fuerzas de Defensa de Israel (FDI), según el portavoz adjunto del Departamento de Estado, Vedant Patel.
La muerte de Abu Akleh, un incidente trágico
Patel declaró que la muerte de Abu Akleh fue “no intencionada” y que se debió a “circunstancias increíblemente trágicas”. El informe, que aún no ha sido publicado, fue solicitado por el senador demócrata Chris Van Hollen, quien pidió que se revelara de forma completa y sin ediciones.
La periodista murió el 11 de mayo mientras cubría un tiroteo entre terroristas palestinos y las FDI. Aunque llevaba un casco y un chaleco reflectante que la identificaban como periodista, no se ha determinado definitivamente quién disparó la bala mortal.
Revisión de las normas de enfrentamiento de las FDI
Desde la trágica muerte de Abu Akleh, Estados Unidos ha presionado a Israel para que revise sus prácticas y garantice que las “normas de enfrentamiento” permitan a periodistas y civiles actuar con seguridad en situaciones volátiles.
La Autoridad Palestina ha acusado a las FDI de atacar a Abu Akleh deliberadamente, mientras que Israel ha coincidido con las conclusiones de Estados Unidos.
La preocupación por posibles modificaciones del informe
El senador Van Hollen expresó su preocupación por la posibilidad de que se modificaran partes del informe antes de su publicación y exigió que se hiciera público de inmediato.
El senador también mencionó que la administración tenía previsto introducir cambios no especificados en el contenido del informe, aunque estos se describieron como “técnicos”.
Periodistas en peligro
Según el Comité para la Protección de los Periodistas (CPJ), 67 periodistas murieron en 2022 mientras ejercían su labor, lo que supone un aumento del 50 % respecto al año anterior. Las cifras más elevadas de periodistas fallecidos se registraron en Ucrania, Nuevo México y Haití.
La familia de Abu Akleh sigue exigiendo justicia y responsabilidad por su muerte, mientras la comunidad periodística sigue enfrentándose a riesgos crecientes en todo el mundo.