Israel no ha recibido aún una lista de rehenes vivos de parte de Hamás, según informó un funcionario israelí con conocimiento de los detalles, quien declaró a The Times of Israel: “Estamos esperando”.
A pesar de ello, el mismo funcionario indicó que se han logrado avances en las negociaciones sobre los rehenes en Doha, aunque estos avances son lentos. “Quisiéramos que todo el proceso avanzara más rápido, pero sin duda hay avances”, señaló.
En cuanto a las diferencias internas dentro de Hamás, el funcionario mencionó que existe una brecha significativa entre las posiciones de los dirigentes en el extranjero y los funcionarios en Gaza. “A los dirigentes en el extranjero les gustaría poner fin a esto”, explicó.
El funcionario también señaló que Mohammed Sinwar, el alto funcionario con base en Gaza, no es menos extremista que su hermano Yahya Sinwar, líder de Hamás asesinado. “Esto definitivamente está causando retrasos”, agregó.
Otro factor que está afectando el avance de las conversaciones es la dificultad que enfrentan los terroristas líderes de Hamás para comunicarse con aquellos en Gaza, según el mismo funcionario.
Además, el funcionario expresó su preocupación por la intervención de Qatar, que, a pesar de volver a su rol como mediador, en ocasiones obstaculiza las negociaciones. “Qatar no deja de jugar y de intentar llevar a cabo una guerra psicológica contra la sociedad israelí con todo tipo de informes, medias verdades, globos experimentales y otras acciones que no contribuyen a las negociaciones”, denunció.
A pesar de estas dificultades, el funcionario afirmó que Israel está dispuesto a continuar utilizando a Qatar como mediador debido a su excelente acceso a los líderes de Hamás.
Por último, el funcionario reiteró que Israel no abandonará el Corredor Filadelfia como parte de ningún acuerdo parcial o en las primeras fases de un acuerdo. “Si logramos poner fin a la guerra, entonces quizá sea posible”, explicó, aunque añadió que le resulta difícil creer que Israel se retire.
“Estamos dispuestos a reducir nuestras fuerzas y redistribuirlas sobre el terreno”, concluyó el funcionario.