Fuentes de alto nivel del establecimiento de seguridad israelí, citadas por Ronen Bergman en Ynet, revelan que Estados Unidos considera anunciar un cese unilateral de hostilidades contra Irán.
La relevancia de las instalaciones nucleares iraníes restantes pierde peso, según los funcionarios, siempre que Israel y Estados Unidos conserven el dominio aéreo sobre Irán. Esta supremacía permitiría ejecutar ataques precisos si Teherán reactiva su enriquecimiento nuclear o lanza misiles contra Israel.
En caso de que se formalice el alto el fuego e irán lo vulnere, el informe indica que Israel y Estados Unidos podrían responder con operaciones conjuntas contra infraestructura crítica o instalaciones energéticas iraníes. La acción buscaría neutralizar cualquier amenaza emergente.
Si Irán acata el cese de hostilidades, la República Islámica podría proclamar que doblegó a Israel y Estados Unidos. Por su parte, ambos países afirmarían que lograron eliminar el peligro nuclear iraní, lo que ofrecería una vía para evitar una escalada mayor de la guerra.