El estreno de “Green Border” en Polonia ha desatado un vendaval de críticas por parte de destacados líderes del país.
El contexto del premiado filme “Green Border”
Dirigido por la cineasta Agnieszka Holland, quien reside en Francia, pero es originaria de Polonia, “Green Border” se adentró en las turbias aguas de una crisis migratoria en la frontera entre Polonia y Bielorrusia.
El filme se llevó el Premio Especial del Jurado en el prestigioso Festival de Cine de Venecia. A pesar de ello, numerosos funcionarios polacos no han dudado en mostrar su desacuerdo con la obra, muchos de ellos incluso sin haberla visualizado.
La trama del largometraje se sitúa en el inhóspito escenario de la frontera, donde retrata el maltrato de inmigrantes del Oriente Próximo por parte de algunos funcionarios polacos.
Reacciones de líderes y acusaciones cruzadas
Jaroslaw Kaczynski, figura política predominante en Polonia, condenó la película en una rueda de prensa, alegando una representación vergonzosa de las fuerzas de seguridad polacas.
Para las autoridades polacas, la crisis migratoria es un problema amplificado por líderes como Alexander Lukashenko de Bielorrusia y Vladimir Putin de Rusia. En este marco, Kaczynski arremetió contra Holland, acusándola de favorecer los supuestos planes de Putin y de mostrar “oikofobia”, una aversión hacia su propio país.
En respuesta, Holland y el productor Marcin Wierzchoslawski defendieron la objetividad del filme, argumentando que su intención nunca fue difamar a Polonia.
Medios, manipulación y escándalos en torno a “Green Border”
Además de la controversia política, Holland y Wierzchoslawski destacaron que ciertos medios manipularon fragmentos del filme, presentando una visión tergiversada del mismo. Esta situación ha llevado a los cineastas a oponerse enérgicamente a tales acciones.
Con las elecciones nacionales de Polonia a la vuelta de la esquina, el partido Ley y Justicia busca reforzar su política antiinmigratoria. Sin embargo, escándalos recientes han empañado su reputación en temas migratorios.
El contrapunto más agudo se produjo cuando el ministro polaco de Justicia, Zbigniew Ziobro, comparó “Green Border” con propaganda nazi, a lo que Holland respondió considerando demandarlo, dadas sus raíces familiares y la tragedia del Holocausto que afectó a sus progenitores.
La realidad detrás de la ficción y la defensa internacional a Holland
Aunque los personajes de “Green Border” son ficticios, reflejan una problemática real en la frontera entre Polonia y Bielorrusia, donde migrantes del Oriente Medio y África han buscado entrar en la Unión Europea.
Funcionarios de la UE acusan a Bielorrusia, aliada de Rusia, de orquestar esta crisis fronteriza. Mientras tanto, el Sindicato de Directores de Estados Unidos ha mostrado su apoyo a Holland, condenando los ataques recibidos por la cineasta.