Argentina iniciará la apertura de todos los archivos estatales vinculados a los criminales nazis que encontraron refugio en el país después del fin de la Segunda Guerra Mundial. La medida responde al compromiso expresado por el presidente Javier Milei, quien aseguró que pondrá a disposición documentos relacionados con el financiamiento de las rutas de escape conocidas como “líneas de ratas”.
Guillermo Francos, jefe de Gabinete de Ministros, confirmó que Milei ordenó desclasificar archivos con información financiera y bancaria, así como registros custodiados por el Ministerio de Defensa. La decisión se concretó tras la reunión que el mandatario sostuvo en febrero con representantes del Centro Simon Wiesenthal en la Casa Rosada, donde reiteró su disposición a colaborar con el acceso a los documentos.
El Centro Wiesenthal, nombrado en honor al reconocido cazador de nazis, ha reclamado durante décadas estos registros. Estima que cerca de 10.000 nazis y otros criminales de guerra fascistas escaparon de Europa y se ocultaron en países como Argentina, México, Estados Unidos, Canadá, Suiza, España y Australia. Algunos fueron incluso utilizados por agencias de inteligencia estadounidenses en plena Guerra Fría, que los extrajeron de Europa para evitar su captura por parte de la Unión Soviética.
Las rutas de fuga más utilizadas partían de Alemania hacia España y luego hacia Argentina, o desde Alemania hasta Roma, pasando por Génova antes de cruzar el Atlántico. Estas vías, complejas y secretas, contaron con apoyo oficioso del Vaticano, que en 1942 comenzó a facilitar la huida de católicos perseguidos, extendiendo luego esa ayuda a los nazis.
Entre los criminales más notorios que llegaron a Argentina se encuentran Adolf Eichmann, considerado el arquitecto del Holocausto, y Josef Mengele, el médico de Auschwitz. Este último llegó al país en 1948 bajo la identidad falsa de Helmut Gregor. Aunque muchos de estos fugitivos ya se consideran muertos, los documentos desclasificados podrían ofrecer detalles cruciales sobre sus escapes y su establecimiento en territorio argentino.