Este lunes, el Foro del Estado Mayor de las Fuerzas de Defensa de Israel (FDI) realizó un seminario especial por el Día del Recuerdo del Holocausto y el Heroísmo. El evento, presidido por el jefe del Estado Mayor, teniente general Eyal Zamir, recordó los ochenta años desde el fin de la Segunda Guerra Mundial.
Durante la apertura, el presidente de Yad Vashem, Dani Dayan, ofreció un discurso. Luego, el rabino Tamir Granot brindó una conferencia centrada en la posibilidad de reconstruirse tras la pérdida, con un mensaje enfocado en la vida y la superación.
A continuación, los comandantes dialogaron con la sobreviviente del Holocausto Lea Balint. En el encuentro, le entregaron un certificado del proyecto “Una flor para una sobreviviente”, con la presencia de Limor Livnat, presidenta de la Fundación para el Bienestar de las Víctimas del Holocausto.
Posteriormente, los asistentes recorrieron las instalaciones de Yad Vashem. La visita incluyó la exposición “Libro de Nombres”, donde Natalie Elgrabli explicó cómo la esperanza funcionó como base de resiliencia frente a la destrucción.
Una ceremonia de colocación de coronas en el Salón de los Nombres cerró el día de conmemoración.
Eyal Zamir, jefe del Estado Mayor, dirigió unas palabras al final del evento:
“De la crisis a la esperanza, del faro a la resurrección, del abismo al crecimiento.”
Cada año, esta fecha recuerda uno de los episodios más oscuros para el pueblo judío y para la humanidad entera.
El Holocausto representó un plan meticuloso de exterminio. También evidenció la fortaleza, el espíritu y la capacidad de resistir ante la muerte, elementos que desembocaron en la reconstrucción nacional.
Israel emergió entre ruinas, y con él, las FDI. Esta fuerza militar protege al pueblo judío desde su renacimiento.
Las FDI encarnan la firmeza del resurgimiento. Representan la esperanza activa y la determinación de seguir adelante. Su fuerza, tanto defensiva como ofensiva, responde con firmeza a los horrores del pasado.
“Es la respuesta decisiva a los horrores del Holocausto: nunca más el pueblo quedará sin protector.”
La misión se mantiene: proteger a Israel, resguardar al pueblo judío y asegurar el futuro de las próximas generaciones.
“Que la memoria de los caídos sea bendita.”