A pesar de las comparaciones que algunos han hecho entre los horrores del Holocausto y el 7 de octubre, la masacre de Hamás “no fue un Holocausto”, declaró el presidente Isaac Herzog durante un discurso en la ceremonia oficial conmemorativa de Yom Hashoah en Yad Vashem.
“Durante las décadas que han pasado desde el Holocausto, hemos reafirmado una y otra vez: «Nunca más», y hemos jurado que el pueblo judío nunca más estaría indefenso y desprotegido. Sin embargo, los horrores del Holocausto sacudieron a todos durante las masacres de octubre, resonando en nuestros corazones”, expresó Herzog.
El presidente compartió que las descripciones de madres silenciando a los bebés para que no lloraran y revelaran su escondite; de niños arrancados de sus padres; y de asesinos abominables, que vieron en los nazis un modelo a imitar y quemaron y masacraron a familias enteras, resonaron con los horrores entre nosotros. Sin embargo, recalcó que “no fue un Holocausto, porque el Holocausto fue el abismo más profundo de la historia humana, en todos los aspectos”. Además, destacó que el 7 de octubre fue “el día en que la mayor cantidad de judíos fueron asesinados y masacrados en un día desde el Holocausto”.
“El 7 de octubre no fue un Holocausto porque hoy tenemos el Estado de Israel y las Fuerzas de Defensa de Israel. Aunque los resultados de la tragedia y la conmoción aún nos persiguen, recordamos que lo que nuestros hermanos y hermanas que perecieron en el Holocausto solo podían soñar, solo imaginar, era tener un país y un ejército propios. Un ejército que incluso ahora lucha en una batalla que aún no ha terminado: por nuestro hogar nacional, la patria de la independencia nacional”, dijo Herzog.
Con firmeza, el presidente aseguró: “A pesar del desastre y el luto que todavía nos aflige, nada puede destruir este hogar”. Prosiguió, “Este pueblo, nuestro pueblo, que soportó el Holocausto más terrible de todos, y construyó para sí la soberanía en su patria dos milenios después de haber sido exiliado de ella por la fuerza, nada puede borrarlo”.
Insistiendo en que los israelíes no permitan que la división y el faccionalismo nos gobiernen, el presidente destacó que la “unidad israelí —rara, valiente, hermosa— que vimos en el último medio año, tanto en la línea del frente como en el frente interno, es nuestro verdadero carácter”.
“Nuestros amados sobrevivientes del Holocausto, ustedes son nuestros héroes eternos. Su legado es un legado de resiliencia, de orgullo, de esperanza. Ustedes son la fuente de mi creencia inquebrantable de que nuestro pueblo puede superar cualquier cosa”, concluyó Herzog.