Una de las pocas máquinas Enigma nazis aún funcionales, célebre por haber sido descifrada por los aliados en la Segunda Guerra Mundial, se subastó en París por casi medio millón de euros, duplicando la estimación inicial, informó el miércoles la casa de subastas Christie’s.
El dispositivo, basado en un sistema de rotores y combinaciones de claves, fue empleado por las fuerzas alemanas para enviar mensajes codificados durante la contienda, en una etapa en la que los servicios de inteligencia aliados no lograban romper su complejidad criptográfica.
La versión M4 vendida correspondía a un modelo avanzado solicitado en 1941 por el almirante Karl Doenitz, con el propósito de coordinar las comunicaciones entre los submarinos alemanes mientras se intentaba imponer un bloqueo naval a Gran Bretaña.
Encerrada en una caja de madera, con teclado y cuatro rotores, la máquina alcanzó un precio de 482.600 euros (556.900 dólares) el martes en París, adjudicada a un comprador anónimo, según indicó Christie’s en un comunicado difundido a la agencia AFP.
El aparato había formado parte de la colección privada de un ciudadano francés antes de la subasta.
Otro ejemplar M4, considerado el modelo más escaso entre los sobrevivientes de Enigma, fue vendido en Nueva York en 2015 por 365.000 dólares, cifra que entonces la casa Bonhams calificó como un récord histórico.
El código Enigma fue descifrado por el matemático británico Alan Turing y su equipo en un proyecto secreto cuya relevancia decisiva para el triunfo aliado se conoció públicamente recién en la década de 1990.
La historia inspiró un libro del autor británico Robert Harris y la película nominada al Óscar en 2014 “El juego de la imitación”, protagonizada por Benedict Cumberbatch.
