El ministerio de Defensa de Dinamarca reveló, el 12 de septiembre de 2025, su decisión de adoptar el sistema de misiles antiaéreos SAMP/T, de origen francoitaliano, como solución principal de largo alcance. Esta elección desplazó al Patriot PAC-3 de Estados Unidos en un vasto programa de adquisiciones, cuyo valor alcanza los 58.000 millones de coronas danesas. El propósito radica en robustecer las defensas contra incursiones aéreas rusas, tal como detalla el boletín oficial del ministerio. Además, el consenso entre los partidos del pacto de defensa respalda esta medida estratégica.
Este convenio prevé la adquisición de ocho complejos integrados que fusionan protecciones de corto, medio y largo alcance. Tales estructuras salvaguardan a la ciudadanía, bases militares e infraestructuras vitales en todo el territorio nacional. Por consiguiente, el desembolso total equivale a $9.110 millones estadounidenses o 7.770 millones de euros, ya que abarca no solo la compra sino también el mantenimiento durante la vigencia del pacto. No obstante, el Comité de Finanzas del Parlamento debe ratificar esta suma, la cual marca el récord histórico en compras armamentísticas del país.
Dentro de este esquema, Dinamarca incorporará al menos cuatro baterías del SAMP/T NG, una versión modernizada del sistema. En total, el paquete distribuye 32 unidades de fuego entre distancias cortas, medias y largas, y se complementa con los 16 cañones Skyranger 30 que ya se obtuvieron para coberturas inmediatas. Para las distancias medias, las alternativas incluyen el NASAMS noruego, el IRIS-T alemán o el VL MICA francés, según evaluaciones que ponderan eficiencia operativa, costos y alineación estratégica.
El consorcio Eurosam, integrado por MBDA Francia, MBDA Italia y Thales, fabrica el SAMP/T con misiles Aster 30 Block 1. Estos proyectiles neutralizan aeronaves y misiles crucero a hasta 120 kilómetros, mientras que contrarrestan amenazas balísticas a 25 kilómetros. Un radar Arabel rotatorio asegura vigilancia ininterrumpida en 360 grados, lo cual contrarresta asaltos masivos desde diversos ángulos. Asimismo, el mecanismo PIF-PAF de control vectorial eleva la agilidad en la fase final de intercepción.
La variante NG del SAMP/T integra un misil interceptor novedoso, diseñado para balísticos y cuasibalísticos, y equipara las prestaciones del Patriot PAC-3 MSE en escenarios de alta complejidad. Cada unidad comprende un radar, consola de mando, lanzadores y un conjunto adaptable de misiles, lo que favorece su despliegue flexible. Así, opera de manera autónoma o se enlaza a redes extensas, en tanto que su movilidad acelera respuestas en entornos dinámicos.
A diferencia de ello, el Patriot PAC-3 MSE, que Dinamarca solicitó el 29 de agosto de 2025 con 36 misiles GEM-T y 20 MSE vinculados al mando IBCS, alcanza 60 kilómetros contra blancos aéreos y supera los 30 kilómetros en altitud. Su radar de fases se especializa en sectores focalizados, lo que lo hace ideal para enfrentar balísticos sofisticados, pero limitados. Aun así, la Agencia de Material del Ministerio priorizó el SAMP/T debido a sus entregas rápidas, costos reducidos y fomento de la industria europea, y esta opción obtuvo una valoración integral superior a la de los sistemas israelíes.
El teniente general Per Pugholm Olsen, director de la agencia, resaltó que las alternativas europeas superan al Patriot en velocidad de suministro y economía, lo cual impulsará la madurez operativa danesa. Esta preferencia surge de una estrategia dual, lanzada en junio de 2025, que combina adquisiciones urgentes como NASAMS, IRIS-T y VL MICA para impactos inmediatos con la edificación de una fuerza perdurable. De esta forma, el primer complejo terrestre entrará en servicio ese mismo año.
La progresión escalará hasta los ocho sistemas completos, cada uno con cuatro baterías, y configurará una defensa estratificada desde 5 hasta más de 50 kilómetros. Tal arquitectura detecta, discrimina y elimina riesgos como drones, cruceros o balísticos, en tanto que las capas cortas y medias resguardan tropas, sitios clave y zonas urbanas compactas. Por su parte, el estrato largo abarca blancos extensos y maneja misiles balísticos con precisión quirúrgica.
Troels Lund Poulsen, ministro de Defensa, destacó que la coyuntura geopolítica exige priorizar estas barreras terrestres, y evocó las lecciones de Ucrania, donde tales defensas han blindado a inocentes ante ofensivas rusas aéreas. Voces de los Socialdemócratas, Venstre, Demócratas de Dinamarca, Partido Popular Socialista y Alianza Liberal aplaudieron la resolución, lo cual consolida el respaldo multipartidista.
Esta opción alinea a Dinamarca con la malla europea de antimisiles, que ya une a Italia, Francia y Polonia, y potencia la colaboración manufacturera continental. Aunque el Patriot demostró fiabilidad en conflictos reales, las saturaciones en sus fábricas estadounidenses dilataron sus cronogramas, a diferencia de la agilidad del SAMP/T. En consecuencia, la diversidad de proveedores europeos acelera la ejecución y mitiga dependencias.
Finalmente, esta inyección presupuestaria satisface los umbrales de la OTAN y amplifica la participación danesa en la seguridad compartida. Los nuevos complejos se adaptan a operaciones móviles y se sincronizan con alianzas transatlánticas, lo cual asegura una madurez plena antes de 2032. Así, Dinamarca eleva su resiliencia y contribuye a un escudo colectivo más robusto en el norte de Europa.