Un funcionario iraní advirtió de una respuesta “contundente” a cualquier medida que amenace la seguridad de Teherán, según informó el lunes una agencia de noticias iraní, después de que Estados Unidos, Gran Bretaña e Israel culparan a Irán de un ataque a un petrolero gestionado por Israel.
Gran Bretaña también convocó el lunes al embajador de Irán en el Reino Unido.
Irán ha negado cualquier implicación en el ataque de la semana pasada frente a las costas de Omán, en el que murieron dos miembros de la tripulación, un británico y un rumano.
“La República Islámica de Irán no duda en proteger su seguridad y sus intereses nacionales y responderá con prontitud y firmeza a cualquier posible aventura”, dijo la televisión estatal citando al portavoz del Ministerio de Asuntos Exteriores iraní, Saeed Khatibzadeh.
Khatibzadeh “lamentó enérgicamente las acusaciones infundadas formuladas por el Secretario de Asuntos Exteriores británico contra la República Islámica de Irán, que fueron repetidas por el Secretario de Estado estadounidense en el mismo contexto y que contenían acusaciones contradictorias, falsas y provocadoras”.
Estados Unidos y Gran Bretaña dijeron el domingo que trabajarían con sus socios para responder al ataque de la semana pasada al Mercer Street, un petrolero de bandera liberiana y propiedad japonesa gestionado por la empresa israelí Zodiac Maritime.
Gran Bretaña dijo que era muy probable que Irán llevara a cabo el ataque, utilizando uno o dos drones.