La primera dama de Siria, Asma al-Assad, se ha convertido en una de las figuras más influyentes del país, gracias a su matrimonio con el presidente Bashar al-Assad y su creciente control sobre aspectos económicos clave en la nación devastada por la guerra.
De financiera a líder influyente
Asma, una exfinanciera de J.P. Morgan, es una de las principales asesoras del presidente en el comité económico secreto del gobierno.
Mercado inmobiliario, sistema financiero e incluso la industria de las telecomunicaciones en Siria llevan su sello.
El viaje de Bashar al-Assad a Abu Dhabi el 19 de marzo fue interpretado como una señal de que está ganando el respeto de sus homólogos regionales.
Ascenso al poder y consolidación financiera
Asma, de 47 años, nació en Londres, pero es de origen sirio. Su matrimonio con Bashar en el 2000 causó controversia debido a la oposición de su padre al gobierno sirio.
Para ganar prominencia y convertirse en un arma indispensable para la dictadura durante el conflicto, fundó en 2007 la ONG Syria Trust for Development.
Desde que las tropas de Assad recuperaron el control de la mayor parte de Siria en 2016, Asma ha sido una presencia visible en la vida pública.
Control de la economía y estrategias “mafiosas”
Después de que Asma superó públicamente el cáncer de mama en 2018, Bashar transfirió parte de los activos económicos estatales a su esposa.
Sin embargo, el conflicto había causado estragos económicos en el país, generando escasez de productos básicos, aumento de la deuda con Rusia e Irán y una devaluación de la moneda superior al 95 %.
Para solucionar estos problemas, el régimen emprendió una campaña “mafiosa” para extorsionar a la élite empresarial, incluidos los partidarios del régimen de Assad.
Asma al frente de la fundación y la red de apoyo
Asma ha tomado el control de la fundación de Rami Makhlouf, el pariente materno de Bashar, y su extensa red de apoyo alauita, lo que le otorga aún más poder en el ámbito humanitario.
El gobierno de Estados Unidos ha notado la tendencia de que los empresarios sirios pueden ser fácilmente manipulados y ha acusado al gobierno de Assad de adquirir muchas de sus empresas.
Aliados importantes y control del sector humanitario
Asma tiene varios aliados clave en su entorno, como Lina Kinayeh, Khodr Ali Taher, EmmaTel y un miembro del comité económico del palacio.
Su amigo cercano Fares Kallas dirige la Syria Trust, que se ha convertido en un importante centro de poder y red de patrocinio. Asma ha mantenido reuniones en el palacio presidencial en las que las ONG extranjeras negocian contratos conel gobierno, y las ONG generalmente ceden a las demandas del régimen.
La dictadura impone regularmente restricciones de viaje a áreas desfavorecidas, redirige la ayuda a sus barrios favoritos y exige que los familiares de los empleados del gobierno ocupen puestos vacantes.
Cooperación con organizaciones internacionales y críticas
La Syria Trust colabora con organizaciones gubernamentales afiliadas, como la Media Luna Roja Árabe Siria, para proporcionar asistencia extranjera tras desastres naturales.
Actualmente, la Syria Trust trabaja en un proyecto de la Fundación Aga Khan en la histórica ciudad de Alepo, por el cual ha sido galardonada con varios contratos. Sin embargo, las relaciones con la ONU se han visto limitadas debido a su “rol institucional”.
La ONU ha criticado a un socio no identificado por contratar a una empresa que “poseía en su totalidad” para renovar refugios por alrededor de $400,000.
Acumulación de riqueza y símbolos de poder
Según empresarios sirios, Asma y Bashar están acumulando riqueza y símbolos de poder para mostrar su superioridad y estatus. Asma ha sido vista usando un atuendo de Valentino de $4,500 y su visa británica.
En 2021, surgieron rumores de que el Reino Unido estaba considerando revocar su pasaporte debido a violaciones de derechos humanos.
La influencia de la primera dama en la economía siria y su habilidad para maniobrar en el ámbito político y humanitario continúan consolidándose, lo que la convierte en una figura clave en la Siria actual.