El Comité Internacional de la Cruz Roja (CICR) informó que su equipo logró entrar en la ciudad de Sweida, ubicada en el sur de Siria, tras los combates registrados este mes. La entrada se realizó el lunes junto a un convoy humanitario de la Media Luna Roja Árabe Siria (SARC), lo que permitió una evaluación directa de las necesidades más urgentes en el área afectada por los enfrentamientos.
Según el CICR, sus operaciones continuarán enfocadas en ampliar el acceso a Sweida y respaldar la respuesta de emergencia que mantiene la SARC en la región. Las autoridades de la organización señalaron que se priorizará la asistencia a los sectores más impactados por la reciente violencia, sin detallar fechas ni proporciones del despliegue humanitario planificado.
Los enfrentamientos comenzaron el 13 de julio en la provincia de Sweida, de mayoría drusa, y concluyeron una semana después con un alto el fuego. Inicialmente, los choques involucraron a combatientes drusos y a tribus beduinas sunitas, cuyos desacuerdos históricos se remontan a varias décadas. La escalada de la guerra generó preocupación internacional por su intensidad y consecuencias civiles.
Testigos, analistas y el Observatorio Sirio de Derechos Humanos reportaron que las fuerzas gubernamentales sirias intervinieron a favor de los beduinos. Según estas fuentes, el enfrentamiento dejó más de 1.400 personas muertas, en su mayoría integrantes de la comunidad drusa, y más de 250 civiles drusos habrían sido ejecutados sumariamente por personal estatal durante las operaciones.
En paralelo, Israel intervino con ataques aéreos que, de acuerdo con su versión oficial, buscaron brindar apoyo a la comunidad drusa. Además, el gobierno israelí envió suministros de ayuda humanitaria a la zona la semana pasada. No se han detallado los contenidos ni el destino exacto de estos envíos, aunque se confirmó su arribo en medio de la crisis.