El CENTCOM estadounidense confirmó que el pasado lunes se llevaron a cabo dos ataques hutíes contra buques comerciales en el mar Rojo.
Según el informe, los ataques del lunes afectaron al petrolero químico Swan Atlantic, de propiedad noruega, y al buque de carga a granel M/V CLARA. Estos incidentes son parte de una serie de ataques marítimos que buscan perturbar el comercio mundial con el propósito de presionar a Israel debido a su conflicto con Hamás. La tensión se intensificó tras el ataque sorpresa del grupo terrorista palestino el 7 de octubre, en el que miles de terroristas causaron la muerte de 1.200 personas, en su mayoría civiles, y tomaron a 240 rehenes.
Objetivo de ataque hutí: Swan Atlantic
El CENTCOM informó que el Swan Atlantic “fue atacado por un dron de ataque unidireccional y un misil balístico antibuque lanzado desde una zona controlada por los hutíes en Yemen”. En respuesta, el buque de guerra estadounidense USS CARNEY se desplazó para evaluar los daños en el sur del mar Rojo.
Alrededor de la misma hora del 18 de diciembre, a las 9:00 a.m. hora de Sanaa, el M/V CLARA reportó una explosión en el agua cerca de su ubicación, aunque no solicitó apoyo ni informó de daños significativos. Afortunadamente, en ninguno de los dos incidentes hubo heridos.
Los hutíes, respaldados por Irán, se atribuyeron la responsabilidad de estos ataques en un comunicado, calificándolos como una “operación militar contra dos barcos vinculados a la entidad sionista”. Estas acciones forman parte de su campaña para presionar a Israel a alcanzar un alto el fuego con Hamás, que ha prometido la destrucción de Israel.
Los hutíes han intensificado sus ataques contra petroleros, cargueros y otros buques en el mar Rojo, poniendo en riesgo una ruta de tránsito que transporta hasta el 12% del comercio mundial.
Hutíes prometen bloquear buques con destino a Israel en el mar rojo
Los hutíes han prometido continuar impidiendo el paso de buques que se dirijan a puertos israelíes en los mares Árabe y Rojo, hasta que se permita la entrada de más alimentos y medicinas en Gaza.
Sin embargo, la empresa noruega Inventor Chemical Tankers, propietaria del Swan Atlantic, declaró en un comunicado que el buque transportaba materia prima para biocombustible de Francia a la Isla Reunión. Afortunadamente, la tripulación india resultó ilesa y el buque sufrió daños limitados.
Para hacer frente a estos ataques, tres buques de guerra estadounidenses, el USS Carney, el USS Stethem y el USS Mason, todos destructores de la Armada, se han desplazado diariamente por el estrecho de Bab el-Mandeb, con el objetivo de disuadir y responder a las acciones de los hutíes.
EE. UU. dirige la Operación Guardián de la Prosperidad
En una respuesta a estos incidentes, el secretario de Defensa estadounidense, Lloyd Austin, anunció la creación de una coalición compuesta por 10 países para hacer frente a los ataques de misiles y drones de los hutíes contra buques en el mar Rojo. Austin explicó que se trata de un desafío internacional que requiere una acción colectiva y presentó la Operación Protección de la Prosperidad, una nueva iniciativa multinacional de seguridad.
El Reino Unido, Bahréin, Canadá, Francia, Italia, Países Bajos, Noruega, Seychelles y España se unirán a Estados Unidos en esta misión. Algunos de los países llevarán a cabo patrullas conjuntas, mientras que otros proporcionarán apoyo de inteligencia en el sur del mar Rojo y el Golfo de Adén.
Los ataques hutíes en el mar Rojo afectaron al petrolero químico Swan Atlantic, de propiedad noruega, y al buque de carga a granel M/V CLARA. Estos incidentes forman parte de una serie de agresiones marítimas destinadas a perturbar el comercio mundial.
El ataque al Swan Atlantic fue realizado con un dron de ataque unidireccional y un misil balístico antibuque, lanzados desde una zona en Yemen controlada por los hutíes. Este ataque representa una escalada en la utilización de tecnología militar avanzada.
En respuesta a los ataques, el buque de guerra estadounidense USS CARNEY se desplazó al sur del mar Rojo para evaluar los daños. Además, Estados Unidos ha desplegado otros destructores y anunciado la creación de una coalición internacional para contrarrestar estos ataques.
Los hutíes, respaldados por Irán, buscan presionar a Israel para alcanzar un alto el fuego con Hamás. A través de estos ataques, intentan obstaculizar el paso de buques vinculados a Israel y afectar rutas comerciales clave.
En reacción a los ataques, se ha formado la Operación Prosperidad Guardián, una coalición de 10 países liderada por Estados Unidos. Esta iniciativa busca enfrentar los ataques de misiles y drones de los hutíes, con países realizando patrullas conjuntas y proporcionando apoyo de inteligencia.