El miércoles, Estados Unidos puso en la lista negra lo que llamó “facilitadores clave” del régimen del dictador sirio Bashar al-Assad, reforzando los esfuerzos para hacer retroceder a Damasco a las negociaciones dirigidas por las Naciones Unidas para poner fin a la guerra civil de Siria que dura casi una década.
Los Estados Unidos impusieron sanciones a 13 entidades y seis personas, incluido el gobernador del Banco Central de Siria, en una nueva ronda de sanciones destinadas a cortar los ingresos del régimen de Assad.
“Los Estados Unidos seguirán empleando todas sus herramientas y autoridades para atacar las finanzas de cualquiera que se beneficie o facilite el abuso del régimen de Assad contra el pueblo sirio”, dijo el Secretario del Tesoro de los Estados Unidos, Steven Mnuchin, en un comunicado.
El Secretario de Estado de los Estados Unidos, Mike Pompeo, advirtió por separado que los ataques contra funcionarios, comandantes y “líderes empresariales corruptos no cesarán hasta que el régimen de Assad y sus facilitadores tomen medidas irreversibles para poner fin a su campaña de violencia contra el pueblo sirio y aplicar realmente la Resolución 2254 del Consejo de Seguridad de las Naciones Unidas”.
La represión de Assad contra los manifestantes en 2011 condujo a la guerra civil, con Irán y Rusia respaldando al régimen de Assad y Estados Unidos apoyando a la oposición.
Millones de personas han huido de Siria y millones más han sido desplazados internamente.
Washington también puso en la lista negra el miércoles al jefe de la Dirección General de Inteligencia de Siria, el Ministerio de Turismo de Siria y a un empresario sirio, Khodr Taher Bin Ali, quien según el Tesoro estaba conectado al gobierno de Assad, así como a su red de negocios.
El Tesoro autorizó hasta el 30 de diciembre las transacciones y actividades necesarias para la liquidación de los negocios con Emma Tel LLC, que fue fundada por el empresario.
La acción del miércoles congela cualquier activo estadounidense de esas listas negras y generalmente impide que los estadounidenses traten con ellos.
El Departamento de Estado, como parte de la acción del miércoles, impuso sanciones al comandante del 5º Cuerpo del Ejército Árabe Sirio, acusando a Milad Jedid de estar involucrado en la prevención de un alto el fuego en el país, y también designó a otros dos sirios.
Siria ha sido objeto de sanciones de los Estados Unidos y la Unión Europea que han congelado los activos del Estado y de cientos de empresas y personas. Washington ya prohíbe las exportaciones a Siria y las inversiones en ese país por parte de los estadounidenses, así como las transacciones relacionadas con el petróleo y los productos de hidrocarburos.