Las autoridades de Siria intensificaron operativos contra el tráfico de drogas y armas en Qusair, donde descubrieron una fábrica de captagon en desuso.
Siria refuerza operativos en la frontera con el Líbano
En una zona remota de Siria, donde el grupo terrorista libanés Hezbolá tuvo presencia, fuerzas de seguridad irrumpieron en un edificio abandonado y encontraron una fábrica de drogas fuera de operación.
Las nuevas autoridades sirias iniciaron la semana pasada una ofensiva de seguridad en Qusair, ubicada en la frontera con el Líbano, para combatir el tráfico ilegal de armas y narcóticos.
Funcionarios sirios han acusado a Hezbolá, aliado del expresidente Bashar al-Assad, de haber abierto fuego contra sus tropas en los enfrentamientos ocurridos tras la caída del régimen.
“Hemos empezado a rastrear las fábricas empleadas por Hezbolá y los restos del gobierno derrocado”, afirmó el mayor Nadim Madkhana, comandante de la fuerza de seguridad fronteriza en la provincia de Homs.
Hezbolá controló Qusair tras la guerra en Siria
Antes de la guerra que estalló en 2011, sirios y libaneses convivían en la zona fronteriza, un territorio de carácter tribal con antecedentes de contrabando.
En abril de 2013, Hezbolá anunció que combatía junto a las fuerzas de Assad y encabezaba enfrentamientos en Qusair, entonces un bastión rebelde.
Tras semanas de combates que obligaron a miles de sirios a desplazarse, Hezbolá se apoderó de la región, estableció bases militares, almacenes de armas y construyó túneles, objetivos de ataques israelíes en los años posteriores.
El apoyo de Hezbolá a Assad fue una muestra de lealtad dentro del llamado “eje de la resistencia” y una estrategia para garantizar su abastecimiento de armas desde Irán a través de Siria.
El tráfico de drogas y armas en la frontera sirio-libanesa
- Hezbolá utilizó Qusair como un centro logístico para sus operaciones en Siria.
- Las autoridades sirias han identificado múltiples fábricas de captagon en la región.
- El comercio ilegal de drogas financió tanto al régimen de Assad como a Hezbolá.
- Desde la caída de Assad, los operativos han descubierto túneles y depósitos de armas abandonados.
El negocio del captagon en Siria
En el edificio allanado por las fuerzas sirias, los periodistas de AFP hallaron grandes bolsas con pastillas de captagon, una droga sintética altamente adictiva producida en masa durante el gobierno de Assad.
El régimen depuesto y Hezbolá, designado como organización terrorista en varios países, han sido acusados de lucrar con el tráfico de captagon para financiar sus actividades.
Meses antes del derrocamiento de Assad el 8 de diciembre, Hezbolá comenzó a retirar combatientes al Líbano para concentrarse en su guerra contra Israel.
Tras la caída del régimen, la mayoría de sus efectivos y aliados salieron de Siria apresuradamente, dejando rastros evidentes de su retirada en instalaciones abandonadas.
El regreso de desplazados a Qusair
En los últimos días, las fuerzas sirias han combatido contra “remanentes de Hezbolá y exmiembros del régimen” en la zona, donde algunos combatientes estaban armados con lanzacohetes, según Madkhana.
Caminos de tierra aún muestran huellas de barricadas instaladas por contrabandistas para frenar el avance militar sirio.
Desde la caída de Assad, sirios desplazados han comenzado a regresar a sus hogares en Qusair. Hassan Amer, de 21 años, regresó tras haber vivido casi la mitad de su vida como refugiado en el norte del Líbano.
“Nos prohibieron volver mientras Hezbolá ocupaba la ciudad”, comentó Amer, mientras restauraba su vivienda con ayuda de familiares y vecinos.
En 2019, Hezbolá anunció que los residentes podían retornar, siguiendo una decisión del gobierno de Assad. Sin embargo, pocos lograron hacerlo hasta años después.
Mohammed Nasser, de 22 años, recordó que durante años su familia fue una de las pocas que permanecieron en la zona, mientras “seguidores de Hezbolá ocupaban las casas menos dañadas”.
Su abuelo, de 84 años, describió el día de la huida de Assad y su círculo cercano: “El día de la liberación, escaparon… y los habitantes volvieron por la noche, antes del amanecer, tras escuchar la llamada a la oración”.