Netanyahu revela que aviones israelíes interceptaron aeronaves iraníes con tropas para apoyar a Bashar al-Assad en los días previos a su derrocamiento.
Acción militar israelí detuvo apoyo iraní a Assad en crisis final
El primer ministro Benjamin Netanyahu reveló que Israel interceptó aviones iraníes que transportaban tropas destinadas a reforzar al entonces presidente sirio Bashar al-Assad en los días previos a su derrocamiento en diciembre de 2024. Durante un discurso en una conferencia organizada por el Jewish News Syndicate, Netanyahu explicó que la operación militar israelí frustró los intentos de Irán por salvar al régimen de Assad, que enfrentaba una ofensiva insurgente liderada por grupos islamistas. La acción, según el primer ministro, involucró el despliegue de cazas F-16 para interceptar aeronaves iraníes en ruta a Damasco, obligándolas a regresar sin cumplir su misión.
Netanyahu afirmó que Irán buscaba enviar “una o dos divisiones aerotransportadas” para apoyar a Assad, quien había sido un aliado clave de Teherán en la región. La decisión de intervenir, según el primer ministro, se tomó tras observar las significativas pérdidas sufridas por Hezbolá, el grupo terrorista respaldado por Irán en Líbano, en enfrentamientos con las fuerzas israelíes. “Tuvieron que rescatar a Assad”, dijo Netanyahu, subrayando la importancia estratégica de impedir que Irán consolidara su influencia en Siria durante la crisis final del régimen.
La caída de Assad marcó el fin de un gobierno de décadas que mantuvo a Siria como un adversario histórico de Israel. Durante su régimen, Siria sirvió como un conducto para el suministro de armas iraníes a Hezbolá, lo que convirtió al país en un punto focal de la estrategia de seguridad israelí. La intervención de Israel, según los comentarios de Netanyahu, reflejó una postura proactiva para contrarrestar la influencia iraní en la región, especialmente en un momento de inestabilidad política en Damasco.
El contexto de la operación israelí se enmarca en un período de intensos enfrentamientos entre Israel y Hezbolá, que debilitaron significativamente la capacidad operativa del grupo terrorista. Según fuentes militares israelíes, los ataques aéreos y terrestres contra posiciones de Hezbolá en Líbano redujeron su arsenal y mermaron sus filas, lo que llevó a Irán a intentar reforzar a sus aliados en Siria. La interceptación de los aviones iraníes, según Netanyahu, no solo frustró este esfuerzo, sino que también envió un mensaje claro sobre la determinación de Israel de mantener su superioridad militar en la región.
Datos clave sobre la intervención israelí en Siria
- Israel desplegó cazas F-16 para interceptar aviones iraníes en ruta a Damasco.
- Irán planeaba enviar “una o dos divisiones aerotransportadas” para apoyar a Assad.
- La operación ocurrió días antes de la caída de Assad en diciembre de 2024.
- Hezbolá, aliado de Irán, sufrió grandes pérdidas en combates con Israel.
- Siria fue un canal clave para el suministro de armas iraníes a Hezbolá.
Estrategia israelí frente a la inestabilidad siria e influencia iraní
La operación descrita por Netanyahu se alinea con la política de larga data de Israel de realizar ataques preventivos contra amenazas percibidas en su frontera norte. Durante años, la Fuerza Aérea Israelí ha llevado a cabo cientos de bombardeos en Siria dirigidos a depósitos de armas, convoyes y posiciones militares asociadas con Irán y Hezbolá. Estos ataques, conocidos como la “guerra entre guerras”, han buscado evitar que Teherán establezca una presencia militar permanente en Siria, lo que representaría una amenaza directa para la seguridad de Israel.
La caída de Assad, tras una ofensiva liderada por el grupo islamista Hayat Tahrir al-Sham, alteró el equilibrio de poder en la región. Aunque el derrocamiento de Assad eliminó a un adversario de Israel, también generó incertidumbre sobre el futuro de Siria y el papel de actores externos como Irán y Rusia, otro aliado clave del régimen sirio. Netanyahu no proporcionó detalles adicionales sobre el destino de las aeronaves iraníes o las tropas que transportaban, pero destacó que la intervención fue un éxito operativo que evitó un refuerzo significativo para Assad.
El discurso del primer ministro también subrayó la importancia de la vigilancia continua de Israel frente a las ambiciones regionales de Irán. La rivalidad entre Jerusalén y Teherán ha definido gran parte de la dinámica de seguridad en Oriente Medio, con Siria como un campo de batalla clave. La interceptación de los aviones iraníes, según analistas militares, demostró la capacidad de Israel para actuar con rapidez y precisión en un entorno volátil, manteniendo su ventaja estratégica.
En el panorama más amplio, la acción de Israel se inserta en un contexto de creciente tensión regional tras la caída de Assad. La reconfiguración del poder en Siria, la debilitada posición de Hezbolá y los esfuerzos de Irán por mantener su influencia han generado un escenario complejo para la seguridad israelí.