Una patrulla militar rusa fue atacada con un artefacto explosivo improvisado por personas no identificadas en el este rural de Daraa, que es la primera vez que las fuerzas rusas son atacadas desde su control de la gobernación el año pasado.
El sábado 13 de julio, la agencia rusa Sputnik citó al director del Centro de Reconciliación de Rusia en Siria, el mayor general Alexei Pachin, diciendo: “Hombres armados en la provincia siria de Daraa detonaron un artefacto explosivo en una carretera [tomada por] una patrulla de la policía militar rusa”.
“Un dispositivo explosivo improvisado (IED) a control remoto, plantado en una parte de una carretera, entre Busra al-Sham y la aldea de al-Sahwa, frente a una patrulla de la policía militar de las fuerzas rusas, fue detonado”.
El corresponsal Enab Baladi para Daraa informó que una patrulla militar rusa fue objeto de una explosión, cerca del cruce de Kherbah en la carretera de la ciudad al-Sahwa, en el este de la zona rural de Daraa.
El reportero agregó que la explosión siguió al paso de la patrulla y que no se registraron víctimas entre los militantes del vehículo blindado, a pesar del daño masivo causado a la carretera como lo muestran las fotos publicadas en las redes sociales.
Un funcionario ruso destacó ayer que el equipo y los vehículos rusos están “intactos”, y señaló que “hombres armados de grupos terroristas han atacado a la patrulla militar para exacerbar las tensiones en la zona”.
Tras la explosión, el área estaba en alerta militar y de seguridad, además de la medida de seguridad establecida por Rusia para proteger a sus fuerzas en Daraa, según el general de división Pachin.
Hasta el momento, ningún lado asumió la responsabilidad de la explosión, en medio de un aumento continuo de las operaciones relacionadas con la seguridad y los ataques contra las fuerzas de Assad y sus puestos en varias áreas de la gobernación de Daraa, realizadas por personas no identificadas.
Las patrullas militares rusas han sido enviadas a los mandados a la gobernación desde que Rusia las controló y las facciones de la oposición partieron hacia el norte de Siria en julio de 2018, mientras intentaban mantener la situación de seguridad bajo control, dada la indignación popular contra las prácticas de las fuerzas de Assad y las condiciones de vida y seguridad cada vez más deterioradas.
Los puestos afiliados al régimen sirio fueron objeto de ataques que afectaron al personal y los puntos de control en los últimos meses, además del rechazo popular de reclutar a los jóvenes de la gobernación dentro de las filas de las fuerzas de Assad para luchar a su lado en las batallas del norte de Siria.
Los residentes de Daraa exigen la liberación de los detenidos en cautiverio en los centros de detención del régimen y poner fin a los repetidos arrestos, así como el alivio de las restricciones de seguridad impuestas a la población de la zona y el cumplimiento de todas las promesas que Rusia hizo a la oposición el año pasado.