El Kremlin confirmó el traslado seguro de Assad a Rusia tras su derrocamiento. Moscú prioriza Ucrania mientras mantiene contacto con nuevos líderes sirios.
Detalles sobre la situación actual de Assad
Rusia confirma traslado seguro de Bashar al-Assad
Bashar al-Assad, quien fue derrocado como presidente de Siria durante una ofensiva rebelde, fue transportado de manera segura a Rusia. Esta información fue confirmada por Sergei Ryabkov, viceministro de Asuntos Exteriores, en una entrevista con NBC News el martes.
Según el Kremlin, Vladimir Putin decidió otorgar asilo al exmandatario sirio, tras su caída, que representa un duro golpe para Irán y Rusia, aliados clave en la guerra sirio. Estos países habían intervenido en la guerra civil, que ya lleva 13 años, con el objetivo de reforzar el régimen de Assad, pese a la presión occidental para que dejara el poder.
Ryabkov aseguró que “está a salvo y eso demuestra que Rusia actúa como corresponde en una situación tan extraordinaria”. Sin embargo, evitó proporcionar detalles sobre la operación, declarando: “No daré más detalles sobre lo que sucedió y cómo se resolvió”.
En respuesta a preguntas sobre la posibilidad de entregar a Assad para ser juzgado, Ryabkov afirmó: “Rusia no es parte de la convención que estableció la Corte Penal Internacional”.
Aspectos clave sobre el asilo de Bashar al-Assad
- El Kremlin confirma que Bashar al-Assad se encuentra a salvo en territorio ruso.
- Rusia no está vinculada a la Corte Penal Internacional para juzgar a Assad.
- El derrocamiento de Assad es un revés significativo para Irán y Rusia.
- El Kremlin minimiza el impacto del cambio político en Siria en su influencia regional.
Reacciones y tensiones en los Altos del Golán
Rusia también se refirió a las tensiones en los Altos del Golán, territorio que Israel considera estratégico. Ryabkov advirtió a Israel sobre la necesidad de “considerar seriamente lo que está sucediendo” y evitar una posible invasión al territorio sirio.
Israel desplegó tropas en la zona de amortiguación creada tras el Acuerdo de Separación de 1974, que puso fin a la Guerra del Yom Kippur. Aunque el gobierno israelí aseguró que no tiene intención de involucrarse en la guerra sirio, justificó su presencia como una medida defensiva.
Paralelamente, Israel lanzó una campaña de bombardeos masivos en Siria. Según las Fuerzas de Defensa de Israel (FDI), estas acciones destruyeron la mayor parte de las capacidades militares estratégicas del régimen de Assad, para evitar que armas avanzadas cayeran en manos de grupos hostiles.
Moscú minimiza el impacto de la caída de Assad en su influencia
El miércoles, el Kremlin restó importancia a las repercusiones que podría tener el derrocamiento de Assad en la influencia rusa en Medio Oriente. Dmitry Peskov, portavoz del Kremlin, declaró que Rusia mantiene contactos con los nuevos gobernantes sirios.
Peskov añadió que el enfoque principal de Moscú sigue siendo la guerra en Ucrania, calificada por Vladimir Putin como una “operación militar especial”. Aunque la caída de Assad representa un desafío, Rusia continuará dialogando con otros países de la región.
La intervención rusa en Siria, iniciada en 2015, fue crucial para consolidar el poder de Assad. No obstante, su derrocamiento representa un retroceso significativo tanto para Rusia como para Irán, mientras ambos países enfrentan conflictos en diferentes frentes.
Nuevos líderes y posibles acuerdos de intercambio de prisioneros
En Siria, el nuevo líder interino asumió el martes como primer ministro, respaldado por los grupos rebeldes que destituyeron a Assad. Este cambio marca un nuevo capítulo en la historia del país tras años de conflicto.
Por otro lado, Sergei Ryabkov señaló que Rusia estaría dispuesta a considerar un nuevo intercambio de prisioneros, similar al realizado en agosto, que incluyó al periodista estadounidense Evan Gershkovich y al exmarine Paul Whelan. Según Ryabkov, un nuevo acuerdo sería “un paso saludable hacia adelante”, aunque no ofreció detalles concretos.