En el contexto de los recientes ataques de Israel contra objetivos en Siria, en respuesta a los actos de violencia dirigidos contra la comunidad drusa, un alto funcionario israelí afirmó que la posibilidad de alcanzar un acuerdo de paz con el nuevo gobierno sirio depende exclusivamente de la conducta del régimen en Damasco.
El funcionario sostuvo que los acontecimientos recientes marcaron un deterioro tras un breve período de calma. “Todo depende de cómo se comporte este régimen. No hay duda de que las cosas han dado un giro negativo en los últimos días. Pero no nos estamos engañando”, declaró, y destacó que la postura israelí responde a criterios objetivos. “Nuestra política no se basa en ilusiones, se basa en la realidad. En primer lugar, queremos seguridad, y somos claros con la otra parte sobre lo que esperamos”.
Según el funcionario, el régimen sirio ha incurrido en errores de juicio graves. “La legitimidad que su régimen ha recibido recientemente puede estar distorsionando su sentido de la realidad. Harían bien en despertar. Este país ha sido desgarrado desde adentro durante años, con ayuda externa, a través de interminables guerras y derramamiento de sangre. Lo que está sucediendo ahora no los está ayudando a llegar a un lugar mejor”.
También señaló discrepancias entre las declaraciones del gobierno sirio en el exterior y su comportamiento dentro del país. “Saben exactamente lo que los europeos quieren escuchar, y cumplen. Pero hay una gran brecha entre su retórica en el extranjero y sus acciones en casa”.
El funcionario afirmó que Israel ha transmitido mensajes directos al respecto. “Por supuesto, preferiríamos que estos eventos no hubieran sucedido, pero no podemos ignorarlos. Como vecinos, no podemos ignorarlos. Eso es todo”.
En relación con una eventual operación israelí en territorio sirio para proteger a la comunidad drusa, el funcionario declaró que existen dos métodos: “uno es amenazar todo el día, el otro es actuar sin hablar”, y añadió que Israel no promueve una ampliación innecesaria del asunto.
Por último, indicó que Estados Unidos y otros actores mantienen conversaciones con Israel desde hace dos días para reducir la tensión. “Tenemos un diálogo positivo con ellos”, afirmó.
Las declaraciones fueron formuladas poco antes de que el secretario de Estado de Estados Unidos, Marco Rubio, expresara preocupación por los hechos. “Queremos que se detengan los combates”, declaró Rubio, quien también informó que Washington se encuentra en contacto con las partes implicadas para facilitar la desescalada, y que podrían presentarse novedades durante la jornada.