Días después de que se evitara milagrosamente la tragedia cuando los terroristas árabes intentaron quemar una casa en la comunidad de Givat Oz Ve’Tzion de Binyamin, cerca de Kochav Hashahar, con niños en casa en el momento del ataque, los árabes de la cercana aldea de Burka, controlada por la AP y conocida por su hostil historial de ataques terroristas contra civiles israelíes, volvieron al lugar de los hechos e intentaron incendiar más casas.
En el incidente de la semana pasada, cuatro chicos se dieron cuenta de que estaban siendo atacados con cócteles molotov lanzados contra su casa. Aunque consiguieron escapar por las ventanas, dos de ellos sufrieron heridas por el humo de las llamas, y otro joven sufrió heridas leves en las piernas. Tras responder a las peticiones de ayuda, las FDI iniciaron la búsqueda de los terroristas.
Tras los sucesos de la semana pasada, el MK Bezalel Smotrich, del partido Sionista Religioso, y el jefe del Consejo Regional de Binyamin, Yossi Dagan, llegaron para dar apoyo a los residentes locales, que han abierto una campaña de recaudación de fondos para reparar los daños del ataque.
Yehuda Lieber, residente de la comunidad, afirmó: “A las 2:15 de la madrugada, los terroristas de la aldea de Burka entraron en Givat Oz V’Tzion y lanzaron cinco cócteles molotov contra una casa en la que había cuatro niños durmiendo”. Según Lieber “Sólo un milagro impidió que sufrieran daños graves ya que la casa se convirtió en humo…”.