La población de Israel se acercó a nueve millones en vísperas del nuevo año, informó el lunes la Oficina Central de Estadísticas de Israel.
Un total de aproximadamente 8.972.000 personas viven en Israel de acuerdo a cifras registradas hasta el 31 de diciembre, según CBS.
De esos casi 9 millones de personas, aproximadamente el 74.3%, o 6.668.000, son judíos. Aproximadamente 1.88 millones, o el 20.9% de la población, son árabes, mientras que 426.000 (el 4,8% del total) no son judíos ni árabes, y están clasificados como “otros”. Una gran parte de esta tercera categoría son inmigrantes no judíos de Europa del Este que se mudaron a Israel bajo el derecho de retorno después de la caída del muro de Berlín en 1989.
Según el informe de la CBS del lunes, la población de Israel creció un dos por ciento durante 2018. Del crecimiento de la población total en 2018, el 81% fue el resultado del crecimiento natural (el número de nacidos vivos menos el número de muertes), mientras que el 19% fue el resultado de la migración neta positiva a Israel.
Un total de 28.000 nuevos inmigrantes se mudaron a Israel durante 2018, mientras que nacieron 185.000 niños. Además, 12.000 ciudadanos regresaron a Israel en 2018.
De los 185.000 nacidos vivos en 2018, el 74.4% correspondió a madres judías, en comparación con el 22.8% a madres árabes. Solo el 2.8% de los nacidos vivos correspondió a madres en la categoría “otros”.
En comparación, 7.000 israelíes emigraron de Israel en 2018, y hubo un total de 45.000 muertes registradas.
La mayoría de los inmigrantes a Israel en 2018 no eran judíos, con una migración neta de judíos (el número total de inmigrantes judíos a Israel menos el número de emigrantes judíos que se estaban yendo) de 12.600. El nivel de la migración árabe neta, principalmente de ciudadanos que retornan, fue de 2.300, mientras que el saldo neto de la migración para “otros” fue de 17.700.
En 2018, la inmigración representó el 84% del aumento total en el número de ciudadanos no judíos, no árabes (otros) en Israel.