Un régimen nutricional rico en grasas y bajo en carbohidratos, conocido como dieta cetogénica, reduce significativamente los efectos cognitivos de las lesiones cerebrales en ratones, y podría hacer lo mismo en humanos, según científicos israelíes.
La dieta cetogénica ya se utiliza para ayudar a algunos niños epilépticos. Los investigadores de la Universidad de Tel Aviv empezaron a investigar los posibles beneficios tras una lesión cerebral y publicaron sus resultados en la revista Scientific Reports.
Descubrieron que más del 50 % de la función cognitiva perdida por los ratones con lesiones cerebrales se recuperó después de que los ratones siguieran la dieta cetogénica durante dos meses, mientras que en un grupo de control de ratones con lesiones cerebrales que seguían una dieta normal, la función cognitiva no mejoró.
“Lo importante aquí es que hemos identificado una dieta que aparentemente puede ayudar a restaurar la capacidad cognitiva después de una lesión cerebral, y habiendo completado el estudio en ratones, estamos avanzando para explorar el mismo enfoque para ayudar a los seres humanos con lesiones cerebrales”, dijo el director de la investigación, el profesor Chaim Pick, de la Escuela de Neurociencia Sagol, a The Times of Israel.
La dieta cetogénica consiste en restringir drásticamente la ingesta de alimentos que contienen carbohidratos, como el pan, el azúcar, los cereales, las legumbres, la bollería e incluso las frutas, y aumentar la ingesta de productos ricos en grasas, como la carne, el pescado, los huevos, el aguacate y la mantequilla.
La dieta provoca un aumento de la producción de cuerpos cetónicos, que son moléculas producidas a partir de ácidos grasos cuando el cuerpo carece de carbohidratos. Pick dijo que se cree que ayuda a los ratones con lesiones cerebrales al aumentar la energía suministrada a sus cerebros.
Dijo que el estudio evaluó el impacto de la dieta utilizando varios parámetros.
“En nuestro estudio, los beneficios de la dieta no fueron evidentes solo por la capacidad cognitiva, sino también por los marcadores bioquímicos entre los ratones que consumieron la dieta cetogénica”, señaló.
El estudiante de doctorado de Pick, Har-Even Kerzhne, que dirigió gran parte de la investigación, dijo: “Esta investigación plantea grandes posibilidades, aunque es importante señalar que hasta ahora se limita a los ratones. Debido a las importantes restricciones nutricionales que implica, cualquiera que se plantee adoptar la dieta por cualquier motivo debe consultar con un profesional, como un médico o un dietista titulado”.