El Aeropuerto Internacional David Ben Gurión, que día y noche recibe y despide a visitantes de todo el mundo que llegan a Israel, es característico por su modernismo y su tecnología de vanguardia. Eso abarca a todos los sectores y aspectos del complejo, incluso en la limpieza.
Creado por los graduados de ingeniería de la Universidad de Waterloo, Pablo Molina y Faizan Sheikh, y distribuído por la empresa canadiense Avidbots, “Neo” es un robot que limpia los suelos de manera automática. Utiliza laser y cámaras 3D, junto con navegación de inteligencia artificial, lo que incluye un sistema de seguridad para evitar colisiones, con parachoques y aletas protectoras. Ahora, en la novena variación del modelo original, el robot limpia hasta 1,2 metros por segundo y navega con una precisión de 5 centímetros.
Neo fue construido inicialmente una máquina autónoma de limpieza de nieve. En sus inicios, los creadores fueron convencidos por un contratista de limpieza de nieve, que pretendía resolver así el problema de inviernos sin tanta nieve y con empleo estacional. Sin embargo, estaban intrigados por el Wal-Mart, que se limpiaba todas las noches.
El robot fregador de suelos fue lanzado a principios de 2017 y actualmente está en su novena generación. Sin embargo, al principio de su desarrollo, el dúo se dio cuenta rápidamente de que no podían convertir una fregadora de suelos manual en una máquina automatizada con sensores. Las complejas diferencias entre los dos modelos se vieron agravadas por el hecho de que no pudieron encontrar una empresa de fregado manual que quisiera asociarse con ellos.
Uno de los aspectos más interesantes de Neo es su capacidad de adaptación al entorno en el que se encuentra. La máquina puede ser equipada con sensores adicionales que rastrean objetos de movimiento rápido, como montacargas, y así poder utilizarse en una fábrica. Además, Neo también carga datos en tiempo real a un portal web sobre cuánta superficie ha limpiado el robot y cuánta agua está siendo utilizada.
Como robot de limpieza autónomo, Neo reduce los costos de producción y, según afirman sus creadores, permite cambiar el enfoque de los equipos de limpieza a otras áreas del trabajo.