La licitación para los planes de un campo solar de 300 megavatios en Israel que proporcionará importantes reservas de electricidad al país recibió el jueves 11 propuestas de grupos nacionales e internacionales.
El campo, junto con una instalación de almacenamiento de energía, se construirá cerca de Dimona.
El parque solar se extenderá a lo largo de 3.000 acres y producirá electricidad de forma fotovoltaica, donde parte de la energía generada se desviará a la instalación de almacenamiento. Se espera que sea el mayor parque solar de Israel y uno de los mayores del mundo, y que ayude al país en su objetivo de pasar a las energías renovables para 2030.
El proyecto se llevará a cabo mediante el método de asociación público-privada (APP), en el que la empresa elegida para llevar a cabo el proyecto se encargará de la planificación, financiación, construcción y explotación del parque solar durante 25 años, tras los cuales el parque volverá a ser propiedad del Estado.
La oferta incluye planes de almacenamiento de energía en inmensas baterías, que serán las mayores de Israel y permitirán flexibilidad en el uso de la energía generada. De este modo, se podrá utilizar la electricidad por la noche, que es cuando más se demanda.
Está previsto que el campo solar se inaugure a finales de 2024, y su apertura permitirá reducir el uso de la electricidad generada a partir de gases contaminantes durante el día.
Se espera que el comité elija una propuesta en los próximos tres meses.
Los grupos que han presentado propuestas son Alumi-Pheonix (Israel), Elior-Allied (Israel), Skatek-Solgarin (Noruega-Israel), Shikun VeBinui (Israel), Meshakim (Israel), Shafir-Almor (Israel), Keren Noy (Israel), Invenergy (EEUU), Keystone-SolarPark (Israel, España), EDF (Francia), Energix (Israel).
“Se trata de un proyecto innovador en el mercado energético israelí”, dijo el ministro de Economía, Avigdor Liberman. “El éxito de este proyecto allanará el camino para la implantación de más tecnologías y grandes instalaciones de acaparamiento que puedan sustituir a las centrales eléctricas contaminantes en el futuro y contribuir al objetivo del Estado en materia de energías renovables”.
“El Ministerio de Finanzas sigue promoviendo proyectos de infraestructuras nacionales para intentar salir de la crisis económica provocada por el COVID-19”.
“El gobierno israelí debe alistarse en la batalla contra la crisis climática en todos los ámbitos, en primer lugar mediante el fomento de las energías renovables”, dijo la ministra de Energía, Karin Elharrar. “Esta es la política que estoy promoviendo como ministra de Energía y la que se nos exige a todos”.