Las compañías de tecnología de defensa de Israel han desarrollado recientemente sistemas tecnológicos que pueden tomar el control de los drones enemigos para prevenir y recopilar información sobre ataques, según un informe publicado el miércoles.
Los sistemas ofrecen a los operadores un control total sobre el avión no tripulado, lo que les permite aterrizarlo de forma segura para su análisis.
“El sistema que desarrollamos es capaz de detectar drones hostiles a una distancia de hasta 2.17 millas y monitorear simultáneamente alrededor de 200 drones”, dijo Asaf Lebovitz, gerente de producto en Skylock, una de las empresas, al diario Haaretz.
El informe fue preparado pocos días después de una serie de ataques con drones en los países árabes vecinos, quienes culpan a Israel. En una de los ataques, las Fuerzas de Defensa de Israel (FDI) declararon que habían dado un golpe en Siria para evitar un ataque con aviones no tripulados iraníes. En otros incidentes ocurridos en el Líbano, las fuerzas armadas israelíes no hicieron ningún comentario.
Skylock demostró su nuevo invento en un evento hace unos dos meses, dice el informe.
“Hemos establecido un lugar específico donde queremos controlar el dron”, dijo Lebowitz. “Tenemos la oportunidad de cortar el enlace entre el avión no tripulado y el operador, y luego tener control remoto sobre él y aterrizarlo, comprobar lo que lleva y a quién pertenece”.
Otras empresas israelíes están desarrollando tecnologías similares, según el informe. Rafael Systems recientemente introdujo su sistema antidron, Drone Dome, que ya está en operación y, de igual manera, tomó el control de los vehículos aéreos no tripulados potencialmente armados y los aterrizó de manera segura.
Las tensiones a lo largo de la frontera norte han aumentado considerablemente desde el sábado por la noche, cuando dos miembros del grupo terrorista Hezbolá, apoyado por Irán, murieron en un ataque israelí en Siria para impedir que los drones iraníes atacaran a Israel, y otros dos drones se estrellaron contra una instalación de Hezbolá en Beirut, del que Israel también fue acusado. El lunes, Líbano dijo que los aviones no tripulados israelíes atacaron una base terrorista palestina en el este del país.
Israel reivindicó la responsabilidad del ataque contra Siria, pero no hizo comentarios sobre los otros ataques. El modelo de avión no tripulado utilizado en el ataque de Beirut planteó serias dudas sobre su origen, y los analistas sugirieron que podrían ser iraníes.
El objetivo del ataque con drones en Beirut era un costoso y raro mezclador industrial para la producción de combustible sólido, y el ataque retrasó los planes del grupo terrorista de desarrollar misiles de largo alcance y alta precisión al menos un año, informaron el martes los medios hebreos. Después del ataque, fuentes de Hezbolá describieron al objetivo como las oficinas de prensa del grupo.