El Ministerio de Salud informó que 81 personas han sido diagnosticadas con fiebre del Nilo Occidental en un brote registrado este mes, de las cuales siete han muerto.
Entre los afectados, 64 se encuentran hospitalizados y seis están conectados a respiradores. La mayoría de los pacientes provienen de la región central del país. El 20% de los infectados presenta síntomas como fiebre, dolores de cabeza y corporales, mientras que menos del 1% desarrolla problemas neurológicos.
El Ministerio de Salud subrayó que el virus no se transmite de persona a persona. La enfermedad se propaga principalmente a través de aves y llega a animales y humanos mediante picaduras de mosquitos. El Dr. Elad Goldberg, subdirector del Departamento de Medicina Interna del Hospital Beilinson, explicó a principios de esta semana que no existen tratamientos específicos para la fiebre del Nilo Occidental.
Aproximadamente el 80% de los infectados no presentan síntomas, mientras que otros desarrollan una infección viral con dolores de cabeza y fiebre. Las mosquitas hembra ponen sus huevos en cuerpos de agua estancada. El Ministerio de Salud recomienda cambiar el agua de los floreros y bebederos de mascotas al menos una vez por semana para evitar la proliferación de mosquitos.
El ministerio también indicó que el virus apareció antes de lo habitual este año, probablemente debido a los efectos del calentamiento global. Las personas en el centro de Israel están en mayor riesgo de contraer la enfermedad debido a la alta humedad de la zona, que crea un entorno propicio para los mosquitos.